El Gobierno y los sindicatos UGT y CCOO suscribieron ayer la segunda pata de la reforma de las pensiones. El acuerdo comprende, entre otros, una histórica demanda de la parte social que ahora verán completada: el aumento de las prestaciones mínimas -en doce pagas- hasta los 1.200 euros. No se trata de un incremento inmediato, ya que el alza se prolongará hasta el año 2027, pero sí que supondrá que casi 17.000 burgaleses vivan en unas condiciones mucho más dignas. A nivel nacional, el entendimiento entre ambas partes beneficiará a 2,1 millones de españoles.

En estos momentos son 16.787 los vecinos de la provincia que perciben entre 743 y 966 euros al mes, dependiendo de variantes como la situación conyugal. El número de perceptores de esta pensión mínima se ha casi triplicado en los últimos años, ya que en 2017 eran 6.473. El grueso de los burgaleses con esta nómina son mujeres (11.379) frente a los 5.208 varones tal y como se desprende de los datos que maneja el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

En relación al régimen en el que han cotizado, el general aglutina a 8.899 perceptores de la pensión mínima mientras que los autónomos son 7.656. Por clases de prestación, a la mayoría les corresponde por jubilación (10.154), seguidos de los de viudedad (4.755), orfandad (1.240), incapacidad permanente (496) y en favor de familiares (142).

En el conjunto del territorio nacional, 1,4 millones estaban incluidos en el régimen general cuando cotizaban y 644.783 en el de autónomos. De nuevo los jubilados son mayoría con casi 400.000 beneficiarios, seguidos de los que perciben una pensión mínima por viudedad (174.227), por orfandad (41.525), por incapacidad permanente (24.824) o en favor de familiares (8.597).

La intención del Ejecutivo es emprender una senda, al estilo de la que se inició con el salario mínimo interprofesional (SMI), para que en el horizonte de 2027 las prestaciones mínimas alcancen el 60% de la renta mediana en España. Hay que recordar que las pensiones no contributivas se han revalorizado este 2023 un 15%, mientras que las contributivas lo hicieron un 8,5% tal y como reflejan los Presupuestos Generales del Estado para el presente ejercicio.

Oleada de jubilaciones. Tampoco se deja de lado las pensiones no contributivas, que seguirían un proceso similar, es decir, crecerían hasta converger en 2027 con el 75% del umbral de la pobreza calculado para un hogar unipersonal, según consta en los planteamientos del Gobierno.

El número de jubilados en la provincia de Burgos nunca había aumentado tanto en tan solo un mes que lo que lo hizo entre diciembre y enero. La Seguridad Social contabilizaba a 1 de enero un total de 63.169 burgaleses con derecho a prestación, 329 más que los registrados a 31 de diciembre. Se trató de un hecho insólito, ya que nunca antes había crecido tanto la cantidad de jubilados con un solo mes de diferencia.