El ladrón que fingía amabilidad para ganarse la confianza de las mujeres mayores a las que luego atracaba en sus portales pasará cinco años y dos meses entre rejas después de que la Audiencia Provincial lo haya condenado por dos robos con violencia e intimidación, a pesar de que la Policía Nacional, cuando lo detuvo, le atribuyó 9 ilícitos de la misma naturaleza.

El modus operandi de este varón de 42 años era muy sencillo. Esperaba a sus víctimas -de entre 75 y 87 años- a la entrada de sus edificios, se prestaba a a ayudarlas con las bolsas y cuando iban a subir al ascensor las empujaba y las atracaba para llevarse sus carteras.

Así quedó acreditado en el juicio que se celebró contra él el pasado 13 de junio. El 29 de diciembre de 2021 se coló en un portal y acompañó a la víctima hasta el ascensor. En un momento dado la empujó contra el cristal y le sustrajo la cartera, que portaba 260 euros y diversa documentación. Al cabo de un mes repitió la misma 'operación' en otro inmueble de la capital. Se acercó a la mujer, se montó con ella en el montacargas y, antes de dar al botón, empujó su carro de la compra contra ella para inmovilizarla y robarle la cartera, con 170 euros y tarjetas bancarias.

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