El Mirandés no tiene veranos sin sustos. La afición rojilla guardaba la esperanza, con la renovación de Joseba Etxeberria en el banquillo, de disfrutar de un periodo de fichajes tranquilo, más allá de los sobresaltos normales, pero a las primeras de cambio el panorama ha pasado de un extremo a otro. El problema ha surgido con el interés del Real Oviedo por una de las piezas claves del conjunto rojillo: Chema Aragón.

El club asturiano ha puesto el foco en el director deportivo. Así lo confirma el presidente del Mirandés, Alfredo de Miguel, quien reconoce estar afectado por la situación y lamenta que la entidad ovetense contactara primero con Aragón y saltara al club. "Todo esto viene del fin de semana, cuando  me llama el presidente del Oviedo", detalla el máximo accionista de la entidad mirandesista.A partir de este punto, todo avanza rápido y De Miguel confirma que Aragón quiere irse al Carlos Tartiere y finalizar ya su etapa en Miranda.

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