Claudio, «el vecino más querido de Villangómez», asegura Ana Belén Díez, una de las organizadoras del Pollogómez, protagoniza uno de los cinco nuevos murales, que se suman a los 44 existentes y que conforman una galería de arte urbano en cada una de las fachadas, plazas, calles y rincones del pueblo, que este fin de semana celebra el festival Pollogómez. Este inmenso retrato tiene una historia detrás, ya que Claudio no sólo es conocido por su gran corazón, también por ser el último pastor de la villa.

Xolaka, de Alcudia de Crespins (Valencia), es el autor de este enorme grafiti. «Presenté un boceto y rápidamente me propusieron retratar a Claudio», comenta este licenciado en Bellas Artes. «Me aburrí del cuadro y decidí introducirme en el mundo de los grandes murales», comparte el artista, que visita Burgos por primera vez este verano. El pintor ha pasado casi 12 horas diarias para finalizar su obra, durante cinco días y la finalizará mañana.

(Más información y fotos, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)