La fase 2 del plan de transición de la Junta en los centros educativos, conocida el pasado viernes, incluye el regreso voluntario a la actividad presencial de los alumnos de segundo de Bachillerato con el fin de preparar la prueba de acceso a la universidad (EBAU), que tendrá lugar del 1 al 3 de julio. Los estudiantes interesados deben solicitarlo por correo electrónico o por teléfono y en el primer día habilitado para hacerlo, el pasado lunes, la Dirección Provincial de Educación recibió 471 peticiones, de las cuales 271 corresponden a institutos y 200 a colegios concertados. Una cifra que representa casi el 23% del total de matriculados y que aumentará «sustancialmente» con las instancias que entraron ayer, último día para comunicar la asistencia.
Las clases se retomarán este viernes y se prolongarán hasta el 23, si bien hay centros de la capital que tienen previsto comenzarlas la semana que viene debido a que ese día coincide con las evaluaciones, como es el caso del instituto Comuneros de Castilla. A este centro retornarán al menos 27 de los 120 alumnos que cursan esta etapa, según avanzó su director, Tomás Gómez, quien aseguró que no existía una previsión sobre la respuesta a esta posibilidad aunque reconoce que «podría haber demanda por el grado de preocupación» que genera la realización de esta prueba, teniendo en cuenta que las clases presenciales se suspendieron el 13 de marzo debido a la pandemia.
Una vez que se conozca el listado definitivo, los centros procederán a la organización de los horarios de asistencia tanto de los estudiantes como de los profesores, ya que deberá tenerse en cuenta la disponibilidad de estos últimos porque la enseñanza telemática continua tanto para todos los de segundo de Bachillerato como para los del resto de niveles. «Se trata de una atención presencial, pero no se puede obviar la que no lo es», afirmó Gómez. De igual forma, se deberán organizar los espacios para cumplir con las medidas de seguridad requeridas, como garantizar la distancia de 2 metros, el uso de mascarillas, salidas y entradas escalonadas, disposición de geles hidroalcohólicos en las aulas y desinfección de estas tras su uso, según la Orden de la Consejería de Educación publicada el lunes.
Las tutorías presenciales solo incluyen aquellas materias susceptibles de evaluación en la EBAU. Así, la mayoría de las peticiones tienen que ver con las asignaturas de Lengua y Matemáticas (de ambas modalidades de Bachillerato), así como de Biología, Química o Física, que son las que más ponderan para aquellos estudiantes que se presentan a la fase específica y voluntaria de la antigua Selectividad con el fin de mejorar su calificación y poder acceder a carreras universitarias con notas de corte.
En el instituto Diego de Siloé, han solicitado actividad presencial 38 de los 65 alumnos de segundo de la etapa posobligatoria. La intención inicial de los responsables del centro es que las clases se retomen mañana, debido a que ya han concluido las evaluaciones. «Intentaremos establecer un horario lo más compacto posible porque continúa la atención telemática», explica su directora, Áurea Arranz.
Dentro de ese plan de transición de la fase 2, se contempla la atención fisioterapéutica al alumnado de centros de educación especial desde este viernes y hasta el 30 de junio, previa comunicación de asistencia, que podrá prorrogarse en el escenario 3 de la desescalada.