Sacyl ya está ofertando en Burgos la cuarta dosis de la vacuna contra la enfermedad del coronavirus a las personas para las que está autorizada en España, que son aquellas que forman parte de los grupos considerados de riesgo en la Estrategia Nacional de Vacunación (novena actualización); básicamente, quienes han recibido un trasplante de órgano sólido o líquido, algunos pacientes oncológicos, algunas personas con Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH), diagnosticados de fibrosis quística, pacientes con necesidad de diálisis o hemodiálisis, personas con síndrome de Down de más de 40 años o enfermos que requieren tratamientos inmunosupresores o inmunomoduladores, entre otros.

La vacunación de estos colectivos de riesgo se reparte entre Atención Primaria y el hospital, que llevan ritmos distintos en esta materia porque también lo son las cohortes a las que se dirigen. Primaria asume la protección de los mayores de 40 años con síndrome de Down y el HUBU, todos los demás. Y mientras que los primeros han completado ya la primera ronda de llamamientos -con escasa respuesta-, fuentes oficiales de Sacyl explicaron que los distintos servicios asistenciales citarán a las personas a quienes atañe esta cuarta dosis una vez que hayan transcurrido cinco meses desde que recibieron la tercera.

Los expertos consideraron que las personas que forman parte de estos grupos tienen un riesgo muy alto de complicaciones en caso de contagiarse por SARS-CoV-2 y explicaron que necesitan tres pinchazos para conseguir la protección que la población general obtiene con dos. Así, las personas incluidas en esos grupos completan pauta tras poner tres veces el brazo (los demás lo hacen con dos) y este cuarto llamamiento para ellos es, en realidad, el primero para una dosis de refuerzo.

Burgos dispone de un generoso excedente para hacer frente a esta última fase de la campaña, con más de 75.000 dosis almacenadas en el servicio territorial de Sanidad.

poca respuesta. De hecho, fuentes oficiales de la Junta señalaron que se está estudiando la devolución de estas vacunas sobrantes una vez que se hayan cubierto todas las necesidades de la provincia. Y, de momento, todo apunta a que la respuesta a la cuarta dosis va a ser bastante minoritaria, aunque la Junta todavía no dispone de datos sobre cuántos refuerzos de este tipo se han puesto.

Fuentes no oficiales de Sacyl involucradas en la campaña de vacunación afirmaron que son pocas las personas del grupo 7 que estén recibiendo esta cuarta dosis. En unos casos, porque se está un poco «a la expectativa» de la evolución de la pandemia y, en otros, por la magnitud de la sexta ola. Hay que recordar que a quienes se hayan contagiado en torno a Navidad y tuvieran pendiente algún pinchazo frente a la covid se les recomienda esperar cinco meses desde el positivo para recibirla. Y eso significa que buena parte de las personas de esos grupos de riesgo que ya podían recibir la cuarta dosis no han acudido a esta convocatoria porque se habían contagiado en los cinco meses previos.

La campaña de vacunación lleva un mes casi estancada, con un 52,3% de la población con tercera dosis y un 87,7% con la pauta completa (es decir, con dos). Sobre cuartas dosis, como ya se ha dicho, aún no hay información.