Juan Ramón Jiménez se ha convertido en una de las vías más transitadas de la ciudad para enlazar con el bulevar o la calle Vitoria o acceder a las naves de Pentasa pero su avanzado estado de deterioro ha hecho que las asociaciones vecinales de los barrios del G-9 y Capiscol urjan su reparación. El tramo que discurre desde el inicio de Esteban Sáez Alvarado hasta pasado el parque Buenavista se encuentra lleno de baches y la capa de asfaltado prácticamente es inexistente o está agrietada. 

Esta situación hace que los vehículos que circulan tengan problemas con los socavones, algunos de ellos de grandes dimensiones. Pero sobre todo son los autobuses que cubren la línea circular o del bulevar los que más sufren las consecuencias al tener que sortearlos. Al Consejo de Barrio de Capiscol han llegado numerosas quejas y se ha decido enviar un escrito al Ayuntamiento. «Presentaremos un escrito en el Registro pidiendo la reparación pero también hemos pedido a los vecinos que remitan las quejas mediante el servicio 010», indicó José Manuel López, presidente del Consejo de Barrio de Capiscol, al tiempo que también se dará traslado a la Junta del Distrito Este. 

Los residentes en barrio del G-9 se han sumado a la reclamación de un arreglo que mejore el estado del asfaltado y piden que se aumente la seguridad de los peatones. «De manera informal le hemos trasladado a algún concejal el estado de abandono que presenta esta vía y hay quejas de muchos vecinos», subrayó Santiago Ausín.

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