La música clásica se renueva

I.L.H.
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No son competencia, sino complementarias. Después de dos temporadas sin recitales y conciertos de este tipo, la ciudad cuenta con dos programaciones paralelas

La Orquesta Barroca de San Sebastián actuará el 25 de febrero. - Foto: Juantxo Egana

No son competencia, sino complementarias. Después de dos temporadas sin recitales y conciertos de este tipo, la ciudad cuenta con dos programaciones paralelas, la del Ateneo Musical de Burgos y la de la Sociedad Filarmónica.

CON TRES CONCIERTOS AL MES NACE EL ATENEO MUSICAL.

Lleva más de cuarenta años programando en el Ateneo Mirandés y tres reconstruyendo la Sociedad Filarmónica Castellana de Aranda. Con la misma intención de impulsar la música clásica en la capital, Javier Giménez ha decidido crear el Ateneo Musical de Burgos, una agrupación que se estrena el viernes con el primer concierto. «Lo siguiente es que se sumen los socios, que espero se vayan apuntando según conozcan la programación porque hay al menos un centenar de personas interesadas». 

La Sociedad retoma su actividad con el concierto del Cuarteto Ribera el día 20.La Sociedad retoma su actividad con el concierto del Cuarteto Ribera el día 20.

El Ateneo Musical nace con la idea de aprovechar las sinergias entre las tres ciudades y los contactos de quien maneja una amplia programación para esas ubicaciones y mantiene relaciones con otras asociaciones y organismos musicales del resto del país. «Se trata de aprovechar los vínculos para conseguir mejores intérpretes y, lo que no es banal, mejores precios en cada concierto». De momento ya hay actuaciones previstas para todo el semestre, con tres fechas al mes.

«Trataremos de programar una temporada estable de conciertos, que normalmente empezaremos en los meses de octubre y terminarán en mayo/junio del siguiente año. La idea es hacer todos los conciertos que nos permita la tesorería que podamos tener con los socios, las ayudas que se puedan conseguir de las entidades públicas y los patrocinadores privados, que espero no falten ante esta propuesta de programación continuada de buena música», asegura Giménez. 

Las ventajas de ser miembro del Ateneo Musical es que se facilita la posibilidad de acudir a entre 22 y 26 conciertos de artistas nacionales e internacionales durante una temporada. Como la cuota es de 150 euros (que se paga de dos veces), las actuaciones salen a menos de 7 euros cada una, en el caso de que fueran solo 22 los conciertos.

Para este viernes, fecha del primer concierto y de la presentación oficial del Ateneo Musical, la entidad ha programado a la Camerata Gasteiz, agrupación creada en 2003 e integrada por profesores y antiguos alumnos del Conservatorio Jesús Guridi de Vitoria. Bajo la dirección de Irune Martínez de Santos, se interpretarán obras de Peter Warloock, Félix Mendelssohn, Francesca Cassini, Luis Aramburu y el Dúo Sefardí, compuesta por su concertino Agustí Coma. Además se estrenará la pieza En un tiempo sin fin, para  soprano y orquesta  de cuerda, de Silvia San Miguel. A las 20:15 horas en la Cultural Cordón.

Sobre la existencia y convivencia de dos entidades similares ahora que la Sociedad Filarmónica ha recuperado su actividad, Giménez no ve ningún problema: «Hay público suficiente para que tengan cabida ambas asociaciones». 

Avance del programa. Este mes actuará también el pianista Paolo Bruno (el 23) y la Orquesta de Pulso y Púa de Francisco Sagredo (29). Para los próximos meses apunten nombres como el Trío Nova (10 de diciembre) Cuarteto de Katalin Sebestyén (28 de enero), Aiguetta Guitar Quartet (11 de febrero), el pianista Dimitris Vasilakis o la Orquesta Barroca de San Sebastián (el 4 y 25 de febrero).

INTÉRPRETES REGIONALES PARA LA SOCIEDAD FILARMÓNICA.

Después de un paréntesis de dos años y medio, la Sociedad Filarmónica retoma la actividad en el último trimestre de 2021. El 30 de septiembre mantuvo una asamblea en la que se aprobaron los estatutos de esta nueva etapa y se presentó la programación con la que inician la temporada. El ciclo comienza el miércoles 20 de octubre con la actuación del Cuarteto Ribera. 

Uno de los objetivos de la renovada Sociedad Filarmónica, como explicaron a este periódico en junio, es conseguir que la media de edad de sus socios rejuvenezca con la incorporación, por ejemplo, de estudiantes del Conservatorio. Por eso, y con idea de que los jóvenes también acudan a los conciertos, han puesto en marcha un carné para menores de 25 años.

Otra de las ideas es añadir a su programación a músicos y compositores de edades más tempranas, y para empezar han querido contar con intérpretes de la región, profesores de los conservatorios de Burgos y Salamanca, así como destacados miembros de las orquestas de Castilla y León. «Además de interpretar a los autores clásicos, se incidirá en obras de compositores burgaleses contemporáneos», aseguran desde la Sociedad.

Como pasa con el Ateneo Musical, este tipo de actuaciones se financian con las aportaciones de los socios, en cuya última reunión participaron 165 miembros. Hasta ahora venían pagando unos 200 euros por temporada que les daba acceso a una veintena de conciertos.

111 aniversario. Dentro de un mes, el 11 del 11, la Sociedad Filarmónica celebra sus 111 años de existencia. Para conmemorar esa fecha  han previsto la presentación del libro La Sociedad Filarmónica de Burgos, los primeros 25 años (1910-1935), escrito por María Jesús Jabato, con prólogo de Óscar Esquivias. Además de la publicación, se festejará el cumpleaños con un recital de piano a cuatro manos por parte de Rubén Ramiro y Raquel Sabarís.

Antes de esa fecha la programación de la entidad cuenta con el concierto de Continuum XXI, el 29 de octubre, y con unas de las dos actuaciones en el Fórum de la Or