Era un día especial para la comparsa de la Peña Recreativa Castellana, ya que regresaba a las escalinatas del Sarmental dos años después por el parón obligado de la pandemia.
Este paréntesis no ha hecho mella en la capacidad de crítica y en la mordacidad del grupo disfrazado en esta ocasión de guacamayos. La inflación, la agenda internacional o el torrente de noticias de dudosa procedencia compartieron protagonismo con la situación de Burgos a tres meses vista de las elecciones. Tiempo de promesas y de acercamiento al ciudadano en busca del voto. Pero la turuta recuerda que no se puede girar a la izquierda en el Bulevar