El Mirandés cerró 2022 mostrando un nivel excepcional en la competición regular. Los rojillos casi llegaron a acostumbrarse al sabor de la victoria, y uno de los principales 'culpables' fue Roberto López. El mediapunta cedido por la Real Sociedad, pese a que al principio de curso no terminaba de carburar, acabó el año natural con goles, ritmo y determinación. Precisamente, por esas cosas su fichaje ilusionaba en Anduva y, ahora, con semejante estado de forma, parece que la ilusión se ha renovado.
Pese a ello, el futbolista rojillo cree que «no ha cambiado nada, he seguido trabajando día a día para que los resultados llegaran». Eso sí, reconoce que «el equipo no empezó muy bien, pero hemos ido cogiendo rodaje».
Precisamente, el parón tuvo lugar cuando el combinado dirigido por Etxeberria disfrutaba de las sensaciones más dulces de la temporada. De igual manera, López afrontaba su mejor momento justo antes de Navidad. Sobre ello, opina que «las vacaciones han llegado cuando tenían que llegar» y dice que «aunque han cortado el buen momento del equipo, estamos muy preparados para la batalla del domingo».
Si vencen al Zaragoza ese día, los rojillos se alzarían con su tercer triunfo consecutivo, algo que para el dorsal 21 «es muy complicado en esta liga». Pese a ello, López muestra confianza en sí mismo y en sus compañeros, pues adelanta que «vamos a ir a por ello, nos tenemos que hacer muy fuertes en las dos áreas, esa va a ser la clave».
Sobre su rival, el jabato cree que los maños siempre son «un equipo que está arriba». Pese a que «por otras cosas lleva dos años peleando por abajo», la plantilla del Mirandés sabe que se trata de un conjunto «que es muy complicado, con su afición y con un campo que va a apretar». No obstante, López cree que los deben «estar tranquilos», pues así podrán «buscar los espacios» y hacer daño a un «rival directo».
Unido a ello, el futbolista aragonés dice que, por sus raíces, «es un partido especial». Eso sí, está «centrado en el Mirandés, les deseo lo mejor, pero a partir del domingo». De hecho, López apunta que en su lista de deseos para 2023, «el primero es salvar al Mirandés y, luego, todo lo que pueda venir bienvenido sea».
Mercado de invierno. Pese a las dos salidas confirmadas -Parra y Marcos Paulo- y aun con el ajetreo previsto en la plantilla durante el mercado invernal, según Roberto López, el vestuario «está tranquilo». Conforme a sus palabras, «lo que se tenga que hacer lo harán Chema Aragón y el presidente». Así, los jugadores se hallan «centrados en el domingo y solo queda ir a por los tres puntos».