Hay poemas dedicados al amor, la vida, el fútbol, la música, la monarquía, la memoria histórica, la política, a colegas como Joan Brossa o Francisco Pino y, por supuesto, a las palabras. Los hay mordaces, bucólicos, plásticos, juguetones, explícitos, inquietantes... La poesía visual juega con el aspecto físico de la letra, el significado de la palabra y la estética de su conjunto. Importa lo que se dice, pero sobre todo importa cómo se dice gráficamente. "Cuando a mi amigo Rafael Gutiérrez-Colomer le preguntaban qué era la poesía visual, contestaba: ‘pues mira’", sostiene Pablo de Barco, uno de los cinco poetas visuales de Castilla y León que exponen en el Arco de Santa María.
Le acompañan el también burgalés Juan López de Ael, el palentino Julián Alonso, el leonés Gustavo Vega y el madrileño afincado desde hace años en Valladolid, Rafael Marín. Los cinco reivindican una disciplina que, aunque haya quien lo pueda considerar ‘moderna’, se remonta como mínimo a la Antigüedad, a los caligramas que creaba el poeta griego Simmias de Rodas en el 300 a.C. Aún así "está tan poco o mal defendida que no tiene unos límites muy claros y se incluyen muchas cosas", añade Del Barco.
Eso hace que, más que la hermana pequeña de la poesía discursiva (el texto clásico literario), sea la hermana marginada. "Hace poco hubo un congreso de poesía en Salamanca y no había nada de poesía visual. No se tiene en cuenta", subraya. Y eso a pesar de que han tocado estos palos creadores como Tápies, Lorca, Alberti, Manolo Valdés, Brossa o Pino.
Homenaje a Bouza. Uno de los poetas visuales burgaleses más reconocidos es Antonio L. Bouza, al que los artistas locales quieren hacerle un homenaje. Se trataría de reunir a creadores de distintos géneros con obra que aludiera al fundador de la revista Artesa, aunque todavía no saben en qué sala o escenario al aire libre exponerla.
El Instituto Municipal de Cultura baraja la misma idea, pero en otro formato y a más largo plazo. En este caso se trataría de reunir la obra del propio Bouza, incluyendo textos inéditos, en un libro de artista en el que colaboraran también otros creadores.
Pero volvamos al presente y a la exposición con la que estos cinco creadores reivindican la belleza de la palabra, la poesía y el verso gráfico. La muestra ha sido organizada por el Ayuntamiento de Burgos con la intención de que gire por las 9 provincias de Castilla y León. De momento ya tienen cerradas tres fechas: la primera en Palencia, en primavera, después irán a Soria en agosto y en Segovia estarán en el Palacio Quintanar en noviembre.
Antes, el día 25, Gustavo Vega presentará en el Arco una de sus obras, Instantes de cristal, hecha de haikus en español, francés y árabe.