Febrero, aprovechando los Carnavales, marzo o abril son los meses de mayor concentración de viajes de estudios. Y si esta es la época preferida, Italia es uno de sus destinos tradicionales. Allí se encuentran 90 alumnos de Bachillerato y 53 de Jesuitas, que llegaron el pasado fin de semana, justo cuando comenzaron a conocerse los primeros casos de coronavirus en el norte del país. Su estancia está transcurriendo con "normalidad", según distintas fuentes, si bien en el caso del colegio concertado se ha modificado parte del itinerario.
"Teníamos prevista una visita a Venecia y Milán, pero pedimos por precaución a la agencia otros lugares alternativos que no están para nada afectados", explica el director del colegio, Javier Pérez de la Canal, quien permanece en contacto con el grupo y con las familias y asegura que los estudiantes "están tranquilos". "Hoy (por ayer) iban a visitar los Museos Vaticanos en Roma y no han notado nada", agregó.
Su próxima parada es hoy en Florencia, donde pernoctarán más noches de las previstas debido al cambio de recorrido, tal y como confirman fuentes de la agencia organizadora. "Hemos incluido visitas a Siena, San Gimignano o Pisa para no subir más al norte", explican, al tiempo que la vuelta se realizará el viernes desde esta última ciudad en "autobús directo" al aeropuerto de Malpensa, en Milán.
La agencia está en contacto permanente con los dos grupos, si bien en el caso del viaje del Comuneros no se ha solicitado ningún cambio ya que su itinerario es diferente al haber entrado por Milán y salir por Roma. De hecho los primeros días visitaron con tranquilidad Venecia, cuando aún no se habían tomado medidas restrictivas como la suspensión del Carnaval, y de ahí se trasladaron a Florencia, donde llegaron ayer, para culminar el recorrido en la capital italiana con regreso el sábado a Burgos. "Están bien y tranquilos", manifiestan.
La compañía asegura que son los dos únicos viajes que en estos momentos tiene en Italia, ya que los destinos para las siguientes salidas de estudiantes son Praga, Andorra, Oporto (Portugal) o circuitos por España. La organización de este tipo de recorridos se realiza con mucha antelación, de tal forma que cada centro suele aportar por sus destinos habituales, como es Italia. A este país tienen previsto viajar los alumnos del colegio La Salle antes de Semana Santa. Su director, Raúl Rojo, sostiene que en principio se mantiene el destino, si bien y dada la alarma creada por el avance de la enfermedad agrega que "habrá que hablarlo con las familias".
La agencia Nautalia es la que se ocupa de este viaje. "El colegio está de vacaciones y no hemos podido reunirnos con los profesores", señala José Manuel Melich, quien alude a que también hay previstas salidas de grupos de otros centros para marzo y abril que entiende "siguen en pie", salvo que el Gobierno dé otras instrucciones. No obstante, precisa que las oficinas de la compañía en Italia están "operando con normalidad", salvando lugares como Venecia o Milán por "estar cerrados los monumentos".
El miedo resiente la actividad de las agencias. Dicen que el miedo es libre y poco se puede hacer ante eso. Las agencias de viajes notan esa incertidumbre de primera mano. Por un lado, porque entran menos clientes en las mismas fechas que años anteriores y, por otro, porque los que viajan preguntan por su seguridad y por si existe algún seguro que cubra este tipo de situaciones, algo que no ofrece el mercado.
"Ya no es China y Europa nos pilla más cerca", asegura la vicepresidenta de la Asociación de Empresarios de Agencias de Viajes de Burgos (Abeav), Gema Alonso, quien reconoce la inquietud que existe ahora no solo para destinos como Italia sino para cualquier otro, incluidos los cruceros. Desde Nautalia, José Manuel Melich comparte esta opinión, ya que "tenemos el mismo número de consultas para ese país que por ejemplo para ir a Londres o París", a lo que añade las numerosas operaciones aéreas que se producen a diario con el país transalpino. "Ahora hay normalidad, pero el escenario es cambiante", señala, si bien asegura que no se han registrado cancelaciones.
Más que de anulaciones, alguna puntual, Alonso habla de una mayor demanda de información por parte de los clientes en un momento en el que estos empiezan ya a pensar en sus vacaciones de verano. "La gente no se atreve a reservar y cambian el destino inicial que tenían", manifiesta, admitiendo que ese miedo está resintiendo la actividad del sector.
Sobre este aspecto, desde otra compañía nacional reconocen que "entra menos gente en la oficina y recibimos menos llamadas que otros años por estas fechas". En su caso, un grupo de 50 personas que tenía previsto viajar a China en mayo lo ha cancelado y lo ha sustituido por otro destino. No obstante, el mensaje que lanzan es de tranquilidad y hacen hincapié en que "se cuentan muchas cosas que son verdad, pero otras no". Se detienen en que los fallecimientos por el coronavirus que se han dado en Italia (7 hasta ayer) son "de personas mayores con patologías" y recuerdan que en España mueren miles de personas al año a causa de la gripe común.