Puede sonar a eterna amenaza de unos barrios hartos de desplantes y trabas municipales -de este y de anteriores equipos de Gobierno- para organizar sus fiestas, pero este año la afirmación de que en San Pedro y San Felices han estado a punto de no celebrar la Cátedra de San Pedro en Antioquía es cierta. Tanto, que las empezaron a preparar en enero y que cuando acudieron al hangar -ahora Andén 56- para reservarlo para algún evento, ya estaba parcialmente ocupado.
La decisión de dejar este fin de semana ‘en blanco’ estaba motivada porque el Ayuntamiento aún les adeuda el 30% de la subvención prometida para 2019, para cuyo cobro les exige la justificación de los pagos, un requisito que no existía en el momento en el que se les concedió el dinero. 

Sin embargo, como recuerdan tanto desde la peña como desde el CD San Felices, "si dejamos de hacer las fiestas un año no se vuelven a hacer" y de ahí que hayan arrimado el hombro para sacar un programa que, sin excesos, tiene actividades "para niños, para adultos y para gente mayor", como recuerda Miguel García, presidente de la peña Los Felices.

No faltará el pregón, en este caso a cargo del responsable de Relaciones Externas de la Policía Local y vecino del barrio Matías Tapia, ni la corte, integrada por Sara Puras y Minaya González como reina mayor e infantil a cuya proclamación a partir de las 19 horas de esta tarde seguirá la actuación del grupo de sevillanas de la asociación de vecinos Nuestro Barrio. 

Mañana, el día grande trae novedades al menos horarias, y es que la misa mayor abandona el horario vespertino para celebrarse a las 12.30, seguida de la recepción de autoridades y el tradicional pincho de morro, morcilla y chorizo que tendrá lugar en el patio de la iglesia. Una jornada que concluye a partir de la 1 de la madrugada con la verbena en la sala Andén 56 con la orquesta The 8 y 1/2 Band. 

Ya el domingo, la misa de difuntos a las 12, la actuación infantil y familiar a cargo de Chipilandia-Sabirón El Camelón en Andén 56 a las 17.30 y el concurso de disfraces para todos y la chocolatada cerrarán las fiestas. Bueno, excepto para los niños y niñas amantes del dibujo, que tienen una cita el martes a las 12 horas en el antiguo CEAS.

Problemas eternos, y ahora las urgencias. Dejando las fiestas a un lado, al tejido asociativo del barrio le preocupan las demandas insatisfechas de los últimos años, pero también las nuevas. Entre las primeras se encuentran el deplorable y peligroso estado de la antigua fábrica Mifer, de la zona del ventorro madre Juana o de la vaquería, todas ellas en el entorno de la carretera de Arcos, a las que se han sumado la mala conservación del parque de San Isidro o los problemas de aparcamiento que auguran que creará la ampliación del patio del instituto Diego de Siloé.

Pero también hay problemas nuevos, y aquí la palma se la lleva el cierre de las urgencias de atención primaria de San Agustín el 2 de marzo y su traslado, junto con las de Gamonal al Divino Valles. Sobre este asunto el más beligerante es Miguel Martínez, del CD San Felices, que desmiente que haya saturación en el centro de salud del barrio y que considera que hay sitio de sobra para una eventual ampliación y que el traslado responde más al interés de los médicos que al de los vecinos.