La ejecución de un acceso adecuado al polígono industrial de Medina de Pomar sigue pendiente casi dos décadas después de que comenzaran las primeras gestiones para ejecutar una rotonda en la carretera Nacional 629 que permitiera canalizar el tráfico de forma segura y eficaz. El alcalde, Isaac Angulo, ha vuelto a retomar el proyecto después de muchas idas y venidas y peleará para que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana asuma la ejecución de esta importante infraestructura, que en 2005 llegó a estar contemplada en los Presupuestos Generales del Estado y nunca llegó a salir a concurso.
Angulo ha mantenido recientemente reuniones con responsables de la Demarcación de Carreteras del Estado en Castilla y León Oriental y los técnicos municipales van a redactar una memoria que pueda servir de base al futuro proyecto. El alcalde medinés considera que "esta rotonda da una entrada al polígono en condiciones" y espera obtener una respuesta del gobierno central esta primavera para un proyecto que, a su juicio, "también ayudaría a reducir la velocidad de los vehículos que entran a Medina por la N-629 y mejorar la seguridad". De hecho, en la recta que da paso a la avenida de Bilbao ya se instaló a finales de 2021 nueva señalización horizontal y vertical luminosa con ese fin.
El alcalde recuerda que en 2005 "hubo problemas para conseguir a tiempo los terrenos necesarios para construir la rotonda" y finalmente el entonces Ministerio de Fomento desechó el proyecto. El suelo necesario para ejecutar la rotonda era propiedad de la Junta de Castilla y León y de un particular pero ya está en manos del Ayuntamiento. No obstante, las gestiones hechas en su día por el Consistorio que en 2010 seguía buscando el apoyo del Gobierno central, nunca prosperaron. El último argumento de Carreteras era que el lugar proyectado podría resultar peligroso por encontrarse en un cambio de rasante. Ante ello, el Ayuntamiento medinés propuso una rotonda en la N-629, pero ya en la zona final del polígono junto al tanatorio. En las últimas reuniones mantenidas, desde Carreteras también consideran que esa ubicación no es la idónea, porque también "habría dificultades de giro hacia el tanatorio y la zona industrial de la margen izquierda, en dirección a Medina, aún no se ha desarrollado". Así pues, la idea es volver al proyecto inicial, que también regulará la entrada al barrio de Pomar.
En 2005, el presupuesto de la rotonda ascendía a 150.000 euros y ahora posiblemente duplique con mucho esta cantidad, pero el Ayuntamiento insistirá al Gobierno central para que la asuma. En Villasante, el Ayuntamiento montijano costeó en solitario la rotonda que da acceso a su polígono industrial también desde la N-629. Invirtió en ella cerca de 400.000 euros en 2017.