La lesión de Ousmane Dembélé en Montilivi y que le podría tener entres tres y cinco semanas de baja supone un importante contratiempo para el entrenador del Barcelona, Xavi Hernández, que tendrá que afrontar un febrero clave para el devenir de la temporada sin su futbolista más determinante en estos momentos.
Las pruebas a las que se sometió el jugador el pasado sábado por la noche al regresar de Gerona confirmaron que el pinchazo que el delantero francés notó en su cuádriceps izquierdo y que le obligó a retirarse en el minuto 26 de partido fue causado por una rotura de fibras.
El extremo galo sufre concretamente una lesión en el recto anterior de la pierna izquierda y, aunque el club catalán no precisó el tiempo de baja, si la rotura del músculo no es completa, el período de recuperación debería oscilar entre las tres y las cinco semanas.
Por lo tanto, en el mejor de los casos, Dembélé estaría fuera del equipo durante todo el intenso mes de febrero, donde el conjunto azulgrana tendrá que hacer frente a hasta siete compromisos: cinco de LaLiga Santander y la eliminatoria de octavos de final de la Liga Europa ante el Manchester United.
En concreto, el punta culé se perdería el Betis-Barcelona (1 de febrero), Barcelona-Sevilla (5 de febrero), Villarreal-Barcelona (12 de febrero), Barcelona-Manchester United (16 de febrero), Barcelona-Cádiz (19 de febrero), Manchester United-Barcelona (23 de febrero) y Almería-Barcelona (26 de febrero).
Desde la Ciudad Condal recuerdan que fueron capaces de sacar adelante los partidos sin su 'jugador franquicia', Robert Lewandowski, que fue expulsado el año pasado en El Sadar y castigado con tres partidos de suspensión. En todos ellos, incluido uno en el Metropolitano, el conjunto culé salió airoso con victoria.
Alternativa probable
Ante esta ausencia, Xavi seguramente optará por lo que hizo en Montilivi: meter en la posición del 'Mosquito' a Pedri y que Raphinha se vaya al extremo derecho. Habría que avanzar la posición de Gavi en la banda izquierda como ya hizo ante el Madrid con muy buen resultado.
Si Ansu Fati sustituyera a Raphinha, uno de los interiores a la banda derecha debería entonces adelantarse.
Lo que está claro es que Xavi no quiere sobrecargar a sus hombres, por lo que para partidos menos exigentes apostará por el clásico 4-3-3, alineando a Raphinha, Lewandowski y Ansu, sacrificando a alguno de los centrocampistas. Pero todo esto es únicamente teoría.