La Junta rechaza el proyecto de camping de lujo en Espinosa

A.C./ Espinosa de los Monteros
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La Administración regional ha denegado al Consistorio la posibilidad de ejecutar en el monte Edilla hasta cuatro planes presentados desde 2020 y el municipio burgalés apostará ahora por un espacio con capacidad para 60 tiendas de campaña

Los cuatro bungalows existentes se pretenden conservar y acondicionar con el nuevo proyecto. - Foto: A.C.

El Ayuntamiento de Espinosa de los Monteros se ha visto obligado a desistir de su proyecto de un cámping de lujo, pero sostenible y respetuoso con el medio ambiente, y apostar por un espacio con capacidad para 60 tiendas de campaña y una pequeña zona reservada a diez autocaravanas para dar uso turístico a la parcela de 15.583 metros cuadrados que tiene junto a las piscinas municipales en el monte Edilla. Las reiteradas negativas del Servicio Territorial de Urbanismo de la Junta de Castilla y León a dar el visto bueno a los hasta cuatro proyectos presentados han llevado al quinto, una zona de acampada, que el alcalde, Raúl Linares, espera que sea ya definitiva.

Nada tiene que ver la propuesta actual, cuyo presupuesto de inversión es de 53.000 euros, con la que el regidor llevó al despacho del delegado territorial de la Junta de Castilla y León, Roberto Saiz, en febrero de 2020. Recién comenzada la legislatura y con una mochila llena de ilusión, el alcalde y el teniente alcalde, Ignacio González, presentaron a Saiz le propusieron que fuese la propia Junta de Castilla y León la que construyese y explotase después -o dejase en manos de una empresa- un cámping de lujo con un presupuesto de 400.000 euros. Enfrente se encuentra el albergue juvenil construido y gestionado por la Administración regional desde 1992, por lo que el glamping pretendía ser un complemento. En pocos meses llegó el primer no a esa inversión y el Consistorio se puso a trabajar para adaptar la idea que tenía a su presupuesto.

Se decidió aumentar de los 25 alojamientos inicialmente previstos -vagones de tren, casas de madera en altura, casitas de paja o bungalós en forma de barril- a 45 para que fuera una empresa privada la que hiciese la inversión de comprar este tipo de construcciones móviles y después la gestión del cámping le rindiese una mínima rentabilidad. La Junta desechó esta posibilidad y todas las que se le han ido presentando después, porque el terreno es rústico de protección natural, porque pertenece a un monte de utilidad pública, el Edilla, y además está dentro de los límites del Monumento Natural de Ojo Guareña.

El alcalde explica que desde la Administración regional se le ha planteado al Consistorio que en todos los casos se superaba el límite de edificación en un terreno de estas características, a pesar de tratarse de construcciones móviles y no definitivas. El hecho de estar en un espacio natural protegido o en un bosque que no permite fuentes de calor bajo los árboles  han sido otros argumentos de la Junta, según señala Linares. La Junta planteó al Ayuntamiento que buscara una parcela sin árboles, pero el Consistorio carece de un terreno adecuado de estas características y, además, se alejaría del complejo de las piscinas municipales que complementa este servicio turístico. Tanto es así que la intención del equipo de gobierno, como adelante el regidor, es la de licitar la explotación de la futura zona de acampada de forma conjunta con las piscinas municipales y su cafetería.

Uso excepcional. Uno de los primeros pasos que ha dado el Consistorio con vistas a poder ejecutar la zona de acampada, una vez que ha adaptado el proyecto a las exigencias de la Junta de Castilla y León, es iniciar el proceso para obtener el uso excepcional del suelo rústico del monte Edilla como espacio de acampada. La solicitud se encuentra por un periodo de 20 días en información pública por si algún afectado considera interponer alegaciones.

El proyecto municipal plantea reformar y conservar los cuatro bungalow de madera que instaló la empresa a la que el Consistorio cedió el uso del suelo en 2005 y que fue rescatado en 2018. Asimismo, se reformará el edificio de baños y servicios comunes y se adaptará la casita de la recepción. Asimismo, se dotará a la zona de caravanas con una toma de agua potable y otra para evacuar las aguas sucias. El planteamiento es que las tiendas de campaña, «desplegables y de fácil montaje y desmontaje acordes con el entorno» no ocuparán más del 50% de los 15.583 metros cuadrados.