Cada 25 de mayo se celebra el Día de África, una fecha para llamar la atención sobre las necesidades que tiene el continente negro, sus riquezas naturales y el crecimiento digno que demanda. La jornada, festiva en muchos países, conmemora la fundación de la Organización para la Unidad Africana (OUA), una organización que nació el 25 de mayo de 1963 en Adís Abeba, Etiopía, «para promover la unidad y la solidaridad de los estados africanos, erradicar el colonialismo y fomentar la cooperación internacional».

El Día de África es también una fecha especial para las ONG burgalesas que trabajan en países como Benín, Senegal o Camerún con proyectos apoyados económicamente por los ciudadanos de la ciudad a través de subvenciones aportadas por el Ayuntamiento en las convocatorias de 2020 y 2021. Es el caso de La Casa Grande, Anvó Africam y Misión América y las contrapartes en los países correspondientes. 

El proyecto en el que en estos momentos trabaja La Casa Grande en la República de Benín está enfocado a la gestión de los residuos sólidos, lo que supone «un cambio de concepción del sistema de basuras, donde hasta hace bien poco los desechos se extendían por doquier y como mucho desaparecían quemándose, con lo que esto significaba de contaminación de los acuíferos y ambientalmente, además de las enfermedades respiratorias y dermatológicas que provocaba en la población», señalan.

La gestión de residuos ha dado trabajo a veinte personas, hombres y mujeres formados y equipados que se encargan de producir dos tipos de biocombustible: gas a partir de biodigestores (contenedores cerrados herméticamente) y biocarbón para uso doméstico. Ya son 100 familias las que utilizan el biogás a partir de un kit compuesto de un hornillo, un conector y una bolsa del biocombustible y miles las que acceden al biocarbón para cocinar los alimentos de su día a día.

En la prevención sociosanitaria se centra Anvó Africam en la Maternidad Municipal del suburbio de Yeumbeul Dakar, en Senegal. Hasta allí ha llegado una ambulancia medicalizada y un programa destinado a la prevención del cáncer de cuello de útero y mama, la atención a las gestantes y a sus hijos, así como la prevención y tratamiento de enfermedades víricas. 

La ambulancia se utiliza para dar asistencia a una población de 160.000 habitantes. Y al barrio de Senegal ha llegado junto a una serie de aparatos auxiliares para el diagnóstico y control de enfermedades: cinco tensiómetros y cinco oxímetros y glucómetros.

El sida y la tuberculosis es una de las pandemias que azota especialmente a África. Misión América trabaja en el centro médico de Nkolondom (Camerún) aportando equipamiento para el diagnóstico, el control y la  hospitalización de enfermos de sida y otras enfermedades oportunistas, con incidencia en un mejor diagnóstico de la tuberculosis.

Inaugurado en el año 2000 y dirigido por las religiosas de San José de Gerona -donde trabaja la burgalesa Basilia Ruiz-, hoy está considerado a nivel nacional como laboratorio de referencia. La ayuda de los burgaleses ha permitido equipar el hospital con aparatos de alta tecnología que permiten, por ejemplo, el diagnóstico en bebés que al nacer son seropositivos y después de tres pruebas se negativiza.