El Burgos tiene que comenzar a preparar la próxima temporada ya. La planificación deportiva es clave y así lo ha dicho muy claramente Julián Calero, que tiene contrato en vigor y quiere saber cuanto antes quién manda en el club para poder comenzar a trabajar. La base de la plantilla ya está hecha. De hecho, 14 de los 19 jugadores que han formado el primer equipo tienen contrato en vigor para la próxima campaña. Los únicos futbolistas que no lo tienen son Marcelo Barovero, Leo Pisculichi, Óscar López. Ryan Leak y Javi Gómez.

Cuanto Michu y Julián Calero afrontaron la construcción de la nueva plantilla partieron de dos premisas. La primera, mantener la base de algunos de los futbolistas de la anterior etapa que consideraban básicos en el nuevo proyecto. Por eso se renovó a jugadores como Miki Muñoz o Galder Cerrajería, y se negoció un nuevo contrato con otros como Rubén Lobato, Roberto Alarcón, Aitor Córdoba, Juanma o Eneko Undabarrena.

Con esa base se comenzó a negociar con otros futbolistas. Y para abaratar los gastos se jugó la baza del futuro, es decir, los jugadores reducían notablemente sus pretensiones para esta campaña y a cambio se les ofrecía dos opciones para su continuidad, ya fuese en la Segunda B Pro  o en Segunda División, con salarios claramente especificados para ambos casos.

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