«No es la forma más bonita de ganar una etapa»

ROBERTO MENA
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Timo Roosen, en teoría el encargado de lanzar a David Dekker, acabó ganando en un sprint en el que se impuso a su compañero Edoardo Affini

Timo Roosen saluda al público desde el podio. - Foto: Valdivielso

Timo Roosen se encontró con una victoria que no esperaba. Reconoció que sumó el triunfo gracias al percance masivo que marcó el desenlace de la jornada. «Espero ganar de una manera diferente porque no es la forma más bonita de ganar una etapa», comentó el corredor del Jumbo Visma nada más bajar del podio.

Aseguró que, pese a oír los ruidos de las bicicletas tras la caída de su compañero David Dekker, no tenía constancia de lo que había ocurrido antes de que llegara la curva que conducía a la línea de meta. «Cogimos la cabeza del grupo y Edoardo Affini se puso a tope desde un kilómetro a meta. Pasamos un badén salido de la nada y oí algo pero no sabía qué había pasado detrás de mí. Vi a alguien a mi lado y pensé que era David Dekker, pero después me enteré de que se había caído, así que me dirigí a la curva a toda velocidad», comentó tras bajar del podio. 

David Dekker. El primero en caer habló en sus redes sociales, donde explicó lo sucedido. «Estoy bien considerando lo que ha ocurrido. Parece que no tengo nada roto, excepto mi moral, y varias heridas. No vi el badén y a esa velocidad y yendo hacia abajo perdí el control.Espero que todos los involucrados estén bien y se recuperen pronto», escribió en Twitter.

Algunos criticaron a sus compañeros por celebrar la victoria y Dekker no dudó en defenderlos. «Veo gente quejándose de la celebración de mis compañeros de equipo. No sabían lo que estaba pasando y con esta velocidad cerca de la meta es imposible saberlo. No me quejo, así que nadie debería hacer esto», comentó el joven ciclista holandés en sus redes sociales.