Más de 1.700 niños podrán vacunarse frente al VPH en 2023

G.G.U.
-

Sanidad se la administrará cuando cumplan 12 años y la pauta es de dos dosis en un intervalo mínimo de seis meses. Hasta ahora, esta campaña solo concernía a las niñas

La vacunación frente al papiloma humano en niños, al igual que ocurre con las niñas, será voluntaria. Este virus en hombres se relaciona con varios cánceres. - Foto: Luis López Araico

Alrededor de 1.716 niños podrán recibir en Burgos la vacuna frente al virus del papiloma humano (VPH) a partir del próximo enero, cuando entrará en vigor en Castilla y León esta novedad en materia de Salud Pública; novedad mediante la que los varones de 12 años pueden recibir una protección que, hasta ahora, solo atañía a las niñas. La Consejería de Sanidad tiene que detallar cómo se desarrollará la campaña, pero la idea es repetir la misma pauta que con las adolescentes: dos dosis separadas por un intervalo mínimo de seis meses. 

Castilla y León implantó la vacunación frente al virus del papiloma humano en 2008, con la cohorte de niñas nacidas en 1994. El objetivo era doble, ya que, por una parte, la infección por VPH es la enfermedad de transmisión sexual más frecuente y, por otra, varios de sus subtipos están muy relacionados con el desarrollo de cáncer del cuello del útero. De ahí que se considerara imprescindible introducir medidas preventivas antes del inicio de las relaciones sexuales. Las campañas se dieron por finalizadas en 2019, cuando la Consejería de Sanidad optó por sistematizar la inmunización frente a este virus y se acordó que se administraría la vacuna -siempre voluntaria- a todas las niñas al cumplir los 12 años.

En Castilla y León se pincha una vacuna efectiva frente a nueve de los cien genotipos del virus y se han alcanzado siempre coberturas muy altas, aunque ahora, al igual que sucede con la protección frente a otras enfermedades, se aprecia cierto descenso. En Burgos, en 2021 recibieron la primera dosis el 87,91% de las niñas y, la segunda, el 81,1%. En 2018, en la última campaña dirigida, la respuesta estuvo próxima al 100% (97%, según datos oficiales de Sacyl).

Ahora, además de tratar de mejorar los resultados en las adolescentes, la Consejería de Sanidad se adelanta en un año al plazo fijado por la Comisión de Salud Pública para iniciar la vacunación en niños. Las razones son las mismas que las esgrimidas con las crías: prevenir la infección por este virus, que en los varones está relacionado con el desarrollo de cáncer anal, de orofaringe (un tipo de cáncer de cabeza y cuello), así como de pene. Por otra, está comprobado que reduce las infecciones en mujeres, lo cual también merma el riesgo de que acaben desarrollando alguna de las enfermedades relacionadas con este virus, del que existen alrededor de cien subtipos.