Burgos Río se mira en el Manzanares madrileño

G. ARCE
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Los arquitectos aplauden la invitación como jurado a Herzog & De Meuron y Navarro Baldeweg, estudios que conocen bien la ciudad y que fueron galardonados en el certamen mundial Madrid Río

Maqueta del Masterplan de los suizos Herzog y De Meuron, donde se resalta el curso del Arlanzón - Foto: Herzog & De Meuron

El río Arlanzón es una de las joyas de la ciudad, forma parte de su historia y su presente, de su geografía urbana, es su pulmón natural y el futuro de Burgos es impensable sin la evolución y la participación de este cauce fluvial como elemento de conexión entre sus vecinos. Sobre esta base, el Colegio Oficial de Arquitectos considera que cualquier actuación sobre este entorno, como la que se pretende con el concurso internacional de ideas Burgos Río, debe contar con la participación y las propuestas de los mejores estudios de arquitectura nacionales e internacionales. Es necesario, en este sentido, convocar un certamen "de prestigio, atractivo y muy bien fundamentado en sus bases sobre lo que realmente se pretende hacer, porque el Arlanzón es una apuesta muy importante de la ciudad y precisa de una cirugía de precisión muy bien diseñada y planificada".

De entrada, los colegiados burgaleses ven con muy buenos ojos que se invite como jurado a profesionales de primera línea mundial como Jacques Herzog, Pierre de Meuron, Juan Navarro Navarro Baldeweg y Michel Desvigne, lo que supone un reclamo para atraer a los mejores arquitectos al concurso. Los invitados ya conocen la propuesta y han mostrado su interés por participar en la misma.

"Si quieres que los mejores de España y del extranjero aporten sus ideas, el jurado tiene que estar a la altura, ser reconocido internacionalmente, y eso requiere inversiones en viajes, en visitas, en publicidad, en organización. Además, el certamen debe contar con el aliciente de varios premios, accésit y finalistas, para incentivar la participación y valorar adecuadamente el esfuerzo económico y de tiempo que destinan los estudios en este proyecto y no solo centrarse en un único ganador", explica el presidente del Colegio, Javier Achirica.

Son muy importantes las bases del concurso, que deben explicar muy bien qué es lo que la ciudad pretende hacer en su río. "Necesitamos un análisis muy profundo de lo que representa el río para la ciudad, de sus valores y de sus debilidades, de la actividad en cada uno de sus tramos. No significa que haya que tocar todo el cauce, igual hay zonas que hay que dejarlas como están y otras adaptarlas al uso que les da la ciudad", añade Arturo González de la Fuente, secretario técnico del Colegio.

Es importante, en este sentido, unas bases con mucha información disponible y la difusión del certamen a nivel internacional, en publicaciones y foros especializados.

En el borrador facilitado al jurado se establecen tres finalistas y al ganador del concurso se le adjudicará el contrato para la elaboración del proyecto técnico, asumirá la dirección facultativa de la obra y será que encargue de elaborar los documentos sectoriales, de planeamiento y de gestión urbanística.

"Tenemos el referente en el concurso internacional de ideas Madrid Río Manzanares que permitió reinventar el río para una capital que no lo tenía. Ha sido una actuación transcendental, sacando a la luz los barrios antes desenfocados por la M-30".

En Burgos Río se plantea una actuación que va desde la zona de la Fábrica de Moneda y Timbre hasta el humedal de Fuentes Blancas. Es un proyecto de ciudad, que se plantea ejecutar por fases y a lo largo de varias legislaturas.

Oportunidades. En el certamen convocado por el Ayuntamiento de Madrid en tiempos de Alberto Ruiz Gallardón como alcalde de la ciudad (2005), resultó ganador el proyecto M-Río, dirigido por el arquitecto Ginés Garrido y el equipo de Burgos&Garrido Arquitectos. El jurado, integrado por prestigiosos arquitectos (Luis Fernández-Galiano, Kurt Foster, Julio Martínez Calzón, Peter Rowe y Vittorio Magnano Lapugnani), valoró que sus ideas daban respuesta a lo que quería la capital en este entorno urbano: la recuperación de las márgenes del río, un estudio de las dotaciones necesarias en el entorno y las alternativas al tráfico (a la circunvalación M-30).

En este concurso obtuvieron un accésit dos de los jurados invitados ahora a Burgos Río: el cántabro Juan Navarro Baldeweg y los suizos Jacques Herzog y Pierre de Meuron, ambos autores del Complejo de la Evolución Humana y del bulevar del Ferrocarril, respectivamente.

"Son dos estudios diferentes. Para entendernos, Navarro Baldeweg es un yate y Herzog&De Meuron es un transatlántico. Ambos tienen una trayectoria incuestionable, el español como un pequeño estudio tradicional y el suizo a escala internacional, con despachos en varios países", explica González de la Fuente.

Además de conocer perfectamente la realidad de Burgos y el entorno del Arlanzón, donde ha trabajado muchos años, Navarro Baldeweg ha firmado dos proyectos fluviales de referencia en Córdoba y Murcia. En la ciudad de la Mezquita, suyo es el Balcón del Guadalquivir, una ribera recuperada para ubicar el Parque del Balcón y el museo hidráulico en el Molino de Martos. En Murcia, el arquitecto cántabro remodeló los Molinos del Río, también como museo hidráulico. No hay que olvidar tampoco el Museo de Altamira, ejemplo de integración de la arquitectura con la naturaleza, ni el Museo de la Evolución Humana, que nace en las riberas del Arlanzón sobre las que ahora se quiere estudiar.

Es sabido que el futuro urbanístico de Burgos lleva la firma del estudio Herzog & de Meuron, ubicado en Basilea. Los prestigiosos arquitectos suizos, ganadores del Premio Pritzker (el considerado como Nobel de la arquitectura), fueron contratados por el Consorcio del Desvío para diseñar los nuevos espacios resultantes de la salida de las vías del tren del corazón de la ciudad, el mayor proyecto urbanístico de principios del XXI.

Entre finales de 2005 y principios de 2006, tras meses de trabajo, Herzog & de Meuron presentaban en público sus propuestas principales: una zona residencial en torno a la antigua estación de trenes, la 'ciudad del AVE' rodeando a la nueva terminal y, conectando ambas, una larguísima avenida de más de 10 kilómetros de longitud desde la Barriada del Pilar hasta la avenida Príncipes de Asturias.

En el aquel proyecto también colaboró otro invitado al jurado de Burgos Río, el estudio de paisajísmo Michel Desvigne Paysagiste. Menos conocido que los anteriores este arquitecto francés atesora una gran trayectoria internacional, aunque en España solo ha trabajado en los ajardinamientos y ordenamiento del bulevar ferroviario de Burgos. Suyos son proyectos de paisajismo en Francia (Le Havre, Burdeos, Marsella, Toulouse, París, etc.), en Estados Unidos, Países Bajos, Japón, Reino Unido y un largo etcétera más.

Calendario. Burgos Río fue una de las propuestas electorales de Ciudadanos para optar a la Alcaldía de la ciudad y uno de los compromisos en el vigente acuerdo de gobierno con el PSOE. Su principal impulsor, Vicente Marañón, vicealcalde, es convocar el concurso internacional de ideas a lo largo de este año, lo que no solo requerirá de trabajo de diseño de las bases y requisitos de participación sino de la obtención de la financiación que requerirá las dietas del jurado así como los diferentes premios del certamen, visitas, documentación, campaña promocional, entre muchos otros conceptos.