A falta de un informe que afine la causa concreta que provocó el incendio que el pasado sábado calcinó media docena de vehículos en el concesionario Mercedes-Benz de Ureta Motor, las pruebas recabadas hasta el momento tanto por el Servicio Municipal de Extinción como por los equipos de la Policía Científica de la Comisaría Provincial apuntan a que se produjo de una manera fortuita. La zona más afectada es un rincón del taller del concesionario que, a priori, podría ser el primer foco del siniestro, apuntan fuentes consultadas por este periódico.

Agentes de la Policía Nacional acudieron ayer por la tarde a las naves del Polígono Burgos-Este del grupo Ureta Motor para recabar pistas que arrojaran algo de luz sobre qué fue exactamente lo que originó el fuego. Fueron, eso sí, con la casi certeza de que todo ocurrió de una manera totalmente casual. Parten también de un informe preliminar realizado por los Bomberos, quienes localizaron la parte más afectada del taller de furgonetas en el que se declararon las llamas. En un rincón había aceite y una máquina de limpieza, y creen que fue precisamente esto lo que provocó el incendio. Los testimonios de los empleados de la empresa también apuntaban en esta dirección. La Científica confirmará esta hipótesis. También pasarán por el concesionario a lo largo de estos días varios peritos para cuantificar los daños (...).

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