La Policía Local de Aranda de Duero detuvo ayer a una madre por un presunto delito de malos tratos habituales en el ámbito familiar (violencia doméstica) tras agredir a su hija de 12 años, según explican desde el cuerpo en un comunicado.

La menor precisió asistencia sanitaria en el Hospital de los Santos Reyes y tras recibir el alta, quedó al cargo de un familiar. 

Los agentes recibieron un aviso del Servicio de Emergencias 112 sobre las 22:35 horas después de que un vecino de la zona centro alertara de que escuchaba a una niña llorar continuamente en el domicilio, sin poder precisar el sitio exacto. Hasta el lugar se desplazaron tres agentes, que localizaron la procedencia de los llantos en una vivienda.

Según indica la Policía Local en un comunicado, "se pudo comprobar que en el domicilio se había producido un episodio de violencia doméstica, habiendo agredido una madre a su hija de 12 años".