Evaristo Arzalluz

Plaza Mayor

Evaristo Arzalluz


La no izquierda

27/01/2022

En España no hay ningún partido al que, si somos estrictos en el uso de los términos, podamos definir como 'de derechas'.

Para que un partido encaje en 'la derecha' ha de cumplir ciertos requisitos, a saber: poner el Estado por encima del individuo (totalitarismo); tener la pretensión de ser partido único, con un único líder que lo sea también del gobierno; eliminar la separación de poderes, sojuzgar a la prensa y controlar la educación. Y ser ateo. Eso es la auténtica derecha.

Hoy, afortunadamente, ningún partido español de los denominados habitualmente de derechas, cumple ni de lejos ni uno sólo de esos requisitos. Entonces, ¿por qué les llamamos 'de derechas'? O, peor aún, ¿por qué ellos se dejan llamar 'de derechas'?

Sencillo: porque a la izquierda le interesa perpetuar el eje derecha/izquierda. ¿Y eso por qué? Porque una parte de la izquierda sí cumple esos requisitos. Y resulta que esos requisitos, curiosamente, son los mismos para la izquierda y para la derecha porque derecha e izquierda, si somos estrictos, repito, y nos atenemos a la filosofía política, son en el fondo lo mismo, las dos caras de una misma moneda, y de hecho se confunden entre sí.

Ejemplos: el partido nazi se llamaba oficialmente 'nacional socialista'; el primer franquismo aplicó una economía planificadora, igual que Mussolini; Ramiro Ledesma Ramos, probablemente el único fascista que ha habido en España, fundó las JONS, de naturaleza sindicalista; la derecha y la izquierda han tenido un único líder, al que han llamado de diversas maneras: Führer o Caudillo las derechas, Gran Timonel, Conducator o papaíto Stalin, las izquierdas.

La mal llamada derecha española no es derecha: son conservadores, o liberales, o monárquicos, pero no tienen nada que ver con la auténtica y genuina derecha, gracias a Dios. Se les puede llamar la 'No Izquierda' pero en ningún caso 'La Derecha'.
Conservadores, liberales, monárquicos: no caigáis en la trampa, que es muy burda y os hace daño.