Desde que Rusia invadió Ucrania no ha dejado de hablarse de una posible III Guerra Mundial. Y del temible uso de armamento nuclear si se llegara a tal extremo.Casi cada día resuenan tan ominosas palabras en noticieros de todo el orbe, y cuántas veces, desde entonces, se ha evocado la capacidad de destrucción de este armamento recordando episodios de la historia tan negros como Hiroshima y Nagasaki. Una herramienta creada por la Fundación Outrider, organización sin ánimo de lucro que realiza estudios y análisis sobre seguridad, políticas y justicia social, permite calcular el impacto que tendría una bomba nuclear en cualquier lugar del mundo. Se trata de un simulador web gratuito (https://outrider.org/es/nuclear-weapons/interactive/bomb-blast) que calcula el número de víctimas mortales, el número de heridos, el radio de calor que generaría la detonación del arma, el alcance de la ola de impacto, el radio máximo de la bola de fuego y hasta dónde se expandiría la radiación generada.

El simulador permite escoger entre cuatro tipo de bombas. Una, es la de Hiroshima, la conocida como Little Boy, primera de la historia en usarse en una guerra.Con una potencia de 15 kilotones, causaría 25.776 muertes y más de 28.000 heridos. Con una potencia de 240 kilotones, la Bomba H Norcoreana provocaría una mortandad terrible: 76.843 personas perderían la vida y más de 44.000 sufrirían lesiones. La Bomba W-87 de los Estados Unidos, Minuteman III, que es la que se pone como ejemplo en el gráfico de este reportaje, dejaría 81.798 muertos y más de 43.000 heridos. Sin bien sería la bomba rusa llamada Zar, de 50.000 kilotones, la más grande detonada nunca, la que causaría la devastación más absoluta porque la radiación alcanzaría los 80 kilómetros cuadrados: morirían 181.115 personas y habría 26.000 heridos.