Aquí sí hay playa pero no cobertura

A.C. / Arija
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Hogares y empresas de Arija sufren la mala calidad de la telefonía móvil y de datos de internet. Movistar va a instalar una antena en la zona pero no funcionará hasta dentro de un año

Gabriel Jecan, gerente del bar del camping, busca cobertura. - Foto: A.C.

A orillas del embalse del Ebro, con playas de arena blanca y una naturaleza desbordante, Arija es un pequeño paraíso que en verano reúne a más de un millar de vecinos y población flotante distribuida entre sus 300 viviendas y las más de 200 parcelas del camping cuando en invierno apenas superan el centenar. En medio de ese atractivo solo fallan las telecomunicaciones que lastran el buen funcionamiento de los negocios o las opciones de teletrabajo entre los vecinos, así como su calidad de vida. Es habitual tener que ir buscando cobertura para sus móviles, muchas veces fuera de sus casas, mientras la velocidad de internet es tan baja que algunos trabajan a las 2 de la madrugada cuando nadie se conecta.

DB ha podido medir la cobertura de telefonía en varios puntos de la localidad, junto a la panadería y la farmacia, en el restaurante El Puñao, uno de los dos negocios hosteleros abiertos en estas fechas y que en verano llegan a ser cinco, o en el camping. Oscilaba entre -116 y -119 decibelios-milivatios, lo que significa que ya no es una señal demasiado débil (entre -105 y -101), sino infinitamente débil. Para ser suficiente o aceptable debería de alcanzar -91 dBm.

Pero nadie mejor que los sufridores mide la intensidad de la señal. Rocío Sáiz, propietaria de El Puñao, lamenta como muchas veces los clientes han llamado para reservar una mesa y no les coge el teléfono, porque sencillamente no suena. Y es que los teléfonos fijos también funcionan con las antenas de la telefonía móvil, salvo en el caso de unos pocos afortunados que conservan el antiguo cable. Así que ni fijo, ni móvil funcionan cuando hay problemas y cada verano colapsan por completo por la llegada masiva de visitantes y usuarios. Díaz, como Gabriel Jecan, del bar del camping han llamado varias veces a su compañía, Movistar, en los últimos meses, pero la solución no llega. En El Puñao le pidieron que elevará un metro el router y lo colocara en una estantería, pero da lo mismo.

La pelea del datáfono. Que funcione el datáfono en este negocio es otra aventura. «Hay días que te defiendes y otros que es imposible», afirma la hostelera que lamenta como incluso se estropea en ocasiones el único cajero automático. Jecan en el camping conoció este verano a una youtuber francesa dispuesta a alquilar un  módulo a largo plazo, pero tras un mes en el camping se fue porque no podía subir los vídeos a su red social. 

En la farmacia, el datáfono si funciona, pero en verano los problemas para dispensar medicamentos con la receta electrónica han obligado al Colegio de Farmacéuticos a contratar un sistema por satélite para suplir la falta de cobertura de datos de internet por ADSL, el sistema contratado.

Los problemas se reproducen en los alrededores de Arija, en localidades de Valdebezana como Herbosa, Arnedo o San Vicente de Villamezán, así como en el Alfoz de Santa Gadea. La antena de telefonía móvil más cercana a Arija se sitúa en Cilleruelo de Bezana, a 6 kilómetros. Es de Orange, pero los montes Otero y Oncha frenan su señal antes de llegar siquiera a San Vicente de Villamezán. A 11 kilómetros está la de Movistar.

En San Vicente de Villamezán, el alcalde pedáneo, Juan Carlos Gutiérrez, pidió hace ya varios años a Movistar una antena, pero no hubo respuesta, y en su caso se ha pasado a una pequeña compañía cántabra en busca de una solución personal, pero insiste en la necesidad de que sea colectiva. «Cada día es más imprescindible una buena cobertura de internet», defiende. A su lado, Josu Aramberri, profesor de redes de telecomunicaciones de la UPV jubilado y con casa en San Vicente, descubrió que ni con un amplificador de señal podría lograr cobertura en su casa, como le explicaron las empresas instaladoras.

La solución llegará, pero no a corto plazo. El alcalde de Arija recibió en noviembre una llamada de Movistar en la que le trasmitieron su interés por la propuesta de solución formulada. Pedro Saiz afirma que esa petición data de 2014 y es ahora cuando la compañía ha dado respuesta. Desde Movistar afirman que están pendientes del replanteo de la obra y de la inminente firma del contrato de alquiler de una parcela en La Mata con el Ayuntamiento arijano. Sin embargo, los trámites y permisos, además de la redacción del proyecto y la contratación y ejecución de las obras demorará la puesta en servicio un año, según la compañía.  En los próximos tres años también llegará la fibra óptica a Arija de la mano de Telefónica (Movistar), tras recibir en diciembre una ayuda del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital que cubre el 30% de la inversión.

Mientras, la empresa Wifinor también da soluciones de internet a todos los vecinos de Arija y su entorno desde hace unas dos semanas  tras instalar nuevos equipos junto al depósito del Gurugú en una parcela también municipal. Su responsable, Daniel Ruiz-Bravo, afirma que pueden ofrecer internet de hasta 40 megas mediante el sistema WiMAX, de transmisión de datos por ondas de radio.