El Juzgado de lo Penal número 3 de Burgos ha condenado a un mirandés a 6 meses de prisión y 1.260 euros de multa por morder a un policía local de la ciudad y golpear a su compañero cuando ambos estaban de servicio. La patrulla intervino en una fuerte discusión que el acusado mantenía con su pareja de madrugada.

Los hechos ocurrieron a las 3 de la mañana del 28 de julio de 2018 en la calle Ramón y Cajal de Miranda de Ebro. El sujeto, que carece de antecedentes penales, se negó a contestar a las preguntas de la dotación policial que acudió al escuchar la gresca que el hombre y la mujer mantenían, «y con ánimo de menoscabar el principio de autoridad» golpeó a uno de ellos. Cuando el otro se acercó en su auxilio, le mordió en la mano derecha y provocó que cayera sobre su rodilla izquierda, lo que le ocasionó lesiones que «requirieron de tratamiento médico así como de 95 días de curación siendo todos ellos, impeditivos para sus ocupaciones habituales», apunta la resolución judicial.

El otro policía local «sufrió contusión en antebrazo derecho para cuya sanidad requirió de una única asistencia facultativa, así como de 3 días no impeditivos para sus ocupaciones habituales», se especifica en la sentencia.

El magistrado le impone la condena por un delito de atentado y dos de lesiones a los uniformados. El funcionario que sufrió los daños más graves tendrá que se indemnizado con 5.111 euros, mientras que al otro le corresponden 120, en ambos casos con el interés previsto en la ley. Asimismo, se le imponen las costas procesales.

La sentencia ha sido dictada de conformidad tras el acuerdo entre la Fiscalía, la acusación particular de los agentes y la defensa, por lo que la condena ya es firme sin opción a recurso, al reconocer el acusado los hechos.