La Junta ha declarado un nuevo brote de infección por coronavirus en la capital burgalesa, donde ya son siete los focos de contagio activos y nueve en toda la provincia, con 65 casos asociados. A estos hay que añadir los muchos esporádicos, sobre todo en Aranda, donde la situación parece haberse contenido tras el boom del fin de semana (40 positivos en un día), pero se sigue vigilando de cerca la situación.

La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha comparecido este mediodía para pedir a la población que extreme las medidas de precaución para frenar desde la base la cadena de contagios y evitar que se multipliquen, lo cual originaría una situación semejante a la de la primavera.