El debate y los reproches políticos escuchados en las Cortes de Castilla y León en torno a la creación de una facultad de Medicina no han pasado desapercibidos en el ámbito académica. El máximo responsable de la institución local, Manuel Pérez Mateos, lamentó «profundamente» que esta reivindicación histórica de Burgos se haya convertido en «bronca política», cuando, a su juicio, la educación y la sanidad deberían «quedar margen» de esa confrontación al tratarse de cuestiones de carácter «básico» para la sociedad.
Más allá de esta valoración y entrando en el detalle de las proposiciones, concretamente de la presentada ayer por el Partido Popular y aprobada por la mayoría de los grupos, matizó que la competencia para poner en marcha facultades de Medicina es de la Junta y «no se puede derivar a órganos que carecen de capacidad ejecutiva», en referencia a la Comisión Académica del Consejo de Universidades en la que ha recaído la polémica instando al Gobierno autonómico a que la convoque de manera inmediata.
«Castilla y León tiene capacidad de sobra para cuatro facultades de Medicina», subrayó, al tiempo que añadió otras Comunidades están siguiendo una política distinta como es el caso de Madrid, rechazando «de lleno» que el debate regional se convierta en un «arma arrojadiza» entre las universidades públicas y las propias provincias.
Dentro del texto que salió adelante también figura que sea dicho órgano el que, en caso de que cualquiera de las universidades de la región formalice una solicitud de nuevos grados oficiales, incluidos los de Medicina en Burgos y León, consensúe la propuesta para que los campus interesados eleven su petición conforme a la normativa vigente, que incluye la organización de las enseñanzas y el aseguramiento de su calidad. Al respecto, el rector señaló que la UBU «ha reclamado todos los años» estos estudios, al igual que los de Farmacia, sin que se haya procedido a presentar la memoria del título «para no perder el tiempo» al no encontrar receptividad en la Junta.
Pérez Mateos se pronunció de igual forma sobre la petición de que el Gobierno regional se dirija al central para que incremente las plazas MIR, lo que, en su opinión, «no es excluyente» para la creación de nuevos grados. Reiteró en este punto la potencialidad de la UBU para poder implantarlo al contar con tres hospitales, uno de ellos universitario (HUBU), además de una Facultad de Ciencias de la Salud, entre otros recursos. «Queremos retener el talento», manifestó, no sin antes defender una reivindicación que «yo no vería como rector, aunque se consiguiera, al tratarse de un proyecto a largo plazo que requiere de mucha inversión y esfuerzo», pero que se trata de un «asunto trascendente» para la sociedad que «tiene que ponerse en marcha cuanto antes».