Un solo billete para ir en AVE a Sevilla, Alicante y Málaga

L.M.
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Renfe incorpora pasajes integrados que multiplican los destinos potenciales desde Burgos. EnChamartín hay que apearse y viajar hasta Atocha -salvo en el caso de la capital valenciana- para subirse a otro convoy

Burgos disfruta de una conexión de Alta Velocidad desde el pasado mes de julio. - Foto: Valdivielso

Cuatro meses después de entrar en servicio la Línea de Alta Velocidad,Renfe va poco a poco incorporando a Rosa Manzano en esta nueva red. Tras el anuncio la semana pasada de una conexión directa entre la capital castellana y Valencia, la operadora ha puesto también en servicio cuatro enlaces integrados al AVE de Burgos en Madrid.

Este tipo de billetes conectan dos trenes de manera oficial, garantizando el viaje aún en caso de pérdida de la conexión y, lo más importante, con una tarifa inferior a la suma por separado. Esta modalidad funciona solo en los AVE (de Burgos el único que sale es a las 7 de mañana y el único que llega lo hace a las 21:18 horas) y avala viajes hasta ciudades como Málaga, Sevilla, Valencia o Alicante. En todas las situaciones -salvo cuando el destino sea la última capital- el viajero que llegue a Madrid-Chamartín Clara Campoamor a las 8:32 horas deberá tomar un cercanías hasta Madrid-Puerta de Atocha. En el caso de Alicante el AVE saldrá del propio Chamartín, aunque de otro andén.

Los precios se mueven en una horquilla que fluctúa entre los 50 y los 60 euros. El trayecto más caro, siempre según la información que ofrece la página web de Renfe, será el que conecte Burgos-Rosa Manzano con Málaga-María Zambrano. El viaje se prolonga durante 5 horas y 26 minutos (contando los 63 minutos de plazo para realizar el cambio de estación en Madrid), lo que permitirá pisar suelo malacitano a las 12:26 horas con un precio de 61,2 euros. Por comparar, el boleto entre la capital de España y la de la Costa del Sol vale de por sí solo más de 50 euros, por lo que el descuento que se aplica gracias a los billetes integrados es notable. No obstante, todo depende de la antelación con la que se saque la plaza. El regreso se dilata hasta las 6 horas y 20 minutos, ya que el trasbordo se prolonga hasta 2 horas.

Al Mediterráneo. El viaje hasta Valencia también tiene billetes integrados en Madrid a la espera de que entre en funcionamiento el AVE directo el 23 de enero. Los que tengan que ir hasta allí antes de esa fecha podrán hacerlo en 5 horas y 33 minutos (llegada a las 12:33 horas) con un precio de 60,9 euros y parada en Cuenca y Utiel Requena. El viajero deberá bajarse del AVE que tomó en Burgos en Chamartín-Clara Campoamor y desplazarse hasta Puerta de Atocha. El tiempo entre la llegada del convoy y la salida del siguiente es de 2 horas y 8 minutos. El regreso es más corto (4 horas y 13) al no detenerse más que en Atocha, desde donde hay que ir hasta Chamartín.

Por 60,05 euros se puede viajar ya entre Burgos y Sevilla-Santa Justa, un periplo que se prolongará 5 horas y 34 minutos. El trasbordo se hace igual que para Valencia, aunque el tiempo de espera es menor, de una hora y 28 minutos. La vuelta no obstante es más corta (5 horas y 5 minutos) y el trasbordo entre terminales en Madrid se acorta a 55 minutos.

Por último, llegar hasta Alicante -donde muchos burgaleses veranean- costará 53,95 euros y 4 horas y 36 minutos.Al no ser un tren directo los pasajeros deberán cambiarse de convoy aunque en la propia Chamartín-Clara Campoamor. En sentido contrario la operativa varía ligeramente: el trayecto se alarga hasta las 5 horas y 28 minutos aunque está justificado: el AVE, que parte de Alicante a las 15:50 horas, para -al contrario que en la ida- en Villena, Albacete y Cuenca. De nuevo el trasbordo se completa dentro de Chamartín, aunque hay que cambiar de tren.