El Consorcio para la ampliación del polígono industrial de Villalonquéjar IVno solo ha abonado la cuota de 2022 a los bancos del denominado tramo A, el que se financia con la venta del suelo, sino que ha conseguido adelantar también la de 2023, de modo que su situación financiera es muy positiva según se puso de manifiesto en el consejo de administración celebrado ayer. 

Durante el año que está a punto de terminar se enajenaron 164.207 metros cuadrados por los que se ingresaron 9.155.463 euros, que han sido los que han permitido pagar la deuda. En el último consejo se confirmó la venta de otra parcela que se escriturará antes de que concluya 2022. 

El consejo también aprobó el presupuesto para el próximo año que asciende a 9.336.435 euros, de los que 7.785.862 se esperan lograr por la venta de parcelas mientras que 1.155.573 euros son los que aporta el Ayuntamiento por el denominado tramo B o no sostenible, tal y como se fijó en el acuerdo de la reestructuración de la deuda. 

Paralelamente, también se dio luz verde al nuevo procedimiento para la venta de las parcelas que todavía están disponibles. A diferencia del reglamento del Consorcio del Desvío en el que solo prima la oferta económica, en el de Villalonquéjar también se tendrá en cuenta la inversión que el comprador esté dispuesto a realizar o la creación de puestos de trabajo en el que caso de que haya más de una oferta por un parcela determinada. 

A partir de ahora se publicarán las parcelas a la venta en la plataforma de contratación pública y se darán diez días para presentar las ofertas. 

Otra de las diferencias respecto al del desvío es que desde la adjudicación de la parcela por el consejo rector hay un periodo de seis meses y no de nueve para formalizar la escritura ante notario. Si no se hace se perdería la fianza, que es un 5% del coste del suelo. 

Hasta ahora se han vendido 659.000 metros cuadrados en Villalonquéjar IV, lo que supone un 45% y se han adjudicado otros 132.836 metros cuadrados.