Lodoso no deja de mirar al cielo. Esta pequeña localidad perteneciente al Ayuntamiento de Pedrosa de Río Urbel no se conforma con albergar el actual observatorio, que  gestiona desde 2010 la Asociación Astronómica de Burgos, sino que se ha propuesto contar con el único Centro Astronómico de la región, un proyecto que completará con la construcción de un albergue, y que será referente regional.Ambos proyectos se han presentado de forma conjunta al Ministerio de Industria, Comercio, Turismo para optar a los fondos europeos Next Generation, con una inversión de 1,5 millones de euros. El Centro de Interpretación se lleva la mayor parte del presupuesto, ya que su construcción y equipamiento ronda el millón de euros. 

Aunque en principio la intención era levantar el inmueble a las afueras de Lodoso, finalmente se construirá en el centro, en el solar  que ya está disponible tras derribar el viejo edificio que se compró a un particular. El alcalde, Óscar Alonso, considera acertada la elección porque dinamizará el pueblo y permitirá la interacción entre visitantes y vecinos.    

El diseño es obra de Blas Barbero, arquitecto municipal, que ha  conjugado tradición y vanguardia, de tal manera que se integra en un céntrico entorno desde donde se divisar la iglesia y algunas de las casas de piedra características del pueblo. La imagen exterior del edificio es la de un volumen cerrado que se abre en determinadas zonas al exterior, y la fachada se resuelve mediante un zócalo ciego de sillería de piedra envejecida y una doble piel en acero corten perforado que filtra y controla la luz en las aulas. Por lo que respecta al interior, se conforma como un contenido de volúmenes escultóricos propios e independientes entre sí, pero interrelacionados, siempre en torno a la cúpula del planetario.   

 En cuanto a su función, se trata de un proyecto esencialmente educativo y social que supondrá la creación de 5 empleos, explica Alonso, quien recuerda que la junta vecinal lleva 3 años planteando  este centro interpretativo y buscando financiación para su ejecución. La convocatoria de las ayudas Next Generation es una oportunidad única, añade, porque se trata de un proyecto innovador y creador de empleo en el medio rural. Alonso no quiere hacerse excesivas ilusiones sobre la llegada de los fondos. En caso de que no sea así, intentarán involucrar a las administraciones local, regional y nacional para poder sacar adelante el proyecto.

El inmueble se distribuye en 4  plantas, con una superficie construida de 570 metros cuadrados. En el semisótano se instalará el vestíbulo, la sala de exposiciones, aseos y el planetario digital. Este es uno de los principales atractivos del Centro. Dotado con la más moderna tecnología, consistirá en una cúpula de unos 8 metros de diámetro, donde se podrá proyectar todo tipo de imágenes y sonidos espaciales. Se dotará de sistema de proyección y multimedia que trabaja con una lente de 360 grados (ojo de pez) que cubre toda la cúpula. 

La planta baja es la de acceso donde estará el vestíbulo principal  y donde se prevé una tienda de recuerdos, mientras que la primera planta se destinará a las distintas aulas de Astronomía. En una primera se proyectará material audiovisual de forma permanente sobre el universo, las galaxias, la vía láctea o el sistema solar. Además, albergará una exposición sobre la historia de la Astronomía y servirá también para hacer exposiciones temporales de fotos tomadas desde el observatorio, así como los trabajos desarrollados por los participantes en los talleres y el material audiovisual realizado con el software de los distintos programas. 

Una segunda aula se destinará para conferencias y charlas divulgativas y a formación. Estará dotada de ordenador y proyector. La tercera será un aula-taller, pensada para que los más pequeños realicen sus trabajos y manualidades. Por su parte, el aula digital estará dotada de ordenadores y servirá para que los participantes experimenten con el distinto software y programas de Astronomía. La planta bajocubierta tiene acceso a la terraza donde se realizarán las observaciones astronómicas y prácticas con telescopio.

La idea del Centro Astronómico es que sea un lugar vivo, didáctico y divulgativo que esté abierto todos los días de la semana a centros educativos y que los escolares puedan permanecer una semana lectiva, siguiendo su actividad habitual y completándola con las oportunidades que ofrece la instalación, incluidas actividades medioambientales y rutas, ya que el proyecto se vincula también al Geoparque de Las Loras, a apenas 9 kilómetros. De ahí que se precise de profesores y monitores y por ese motivo, el Ayuntamiento se embarca en la construcción de un albergue para acoger a los alumnos ese tiempo. Igualmente estará abierto a la organización de cursos y actividades para diversos colectivos. La intención municipal es licitar la gestión del mismo. 

En cuanto al albergue, no será un edificio al uso, sino que se trata de una pequeña 'urbanización' a base de módulos que se instalarán en una finca a unos minutos del Centro Así, habrá dos módulos para dormitorios, uno de niñas y otro para niños, con capacidad cada uno para 40 plazas, con camas en litera; otro módulo albergará los baños; un tercero, la cocina y comedor  y otros un aula. Todo en torno a una patio o jardín.