A finales de junio, la dirección de Vox recomendó a sus dos ediles en el Ayuntamiento de Aranda de Duero, Vicente Holgueras y Sergio Chagartegui, que no aceptasen ninguna concejalía. La alcaldesa barajaba entonces la posibilidad de hacer cambios en el equipo de gobierno y propuso al primero asumir Personal y al segundo, Medio Ambiente. La dirección de la formación entendía que no era el momento oportuno y lo vieron como una estrategia del PP para desgastarles. La decisión final quedó en manos de los concejales. Mientras que Chagartegui siguió la disciplina del partido, Holgueras hizo oídos sordos. Algo que le ha costado su expulsión de Vox.

Tal como aseguran a este periódico fuentes de la dirección nacional, Holgueras «pasa al grupo de no adscritos, abandona la disciplina de partido y causa baja como afiliado».

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