Los vendedores de textil piden el cambio al polígono docente

C.M.
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El Ayuntamiento encarga informes para ver si es posible trasladar el mercadillo al campus del Vena. Los comerciantes rechazan dividir los puestos entre el parque de los Poetas y el disuasorio

Un momento de reunión que ayer mantuvieron los comerciantes en el aparcamiento disuasorio. - Foto: DB

Prefieren esperar a la total normalidad y no instalar sus puestos en la segunda fase de la desescalada. Los vendedores ambulantes de textil que durante todo el año se instalan en el parque de los Poetas (miércoles), el paseo del Empecinado (viernes) y la avenida de Castilla y León (domingo) apuestan mayoritariamente por volver a estar con sus clientes con las máximas garantías de seguridad aunque tengan que esperar un mes más. 

En una reunión de urgencia celebrada a mediodía del miércoles en el aparcamiento disuasorio de Las Torres, con la asistencia de medio centenar de vendedores, acordaron esta posición y descartaron instalar sus puestos repartidos entre el parque de los Poetas y el disuasorio como ha propuesto el área de Comercio para cumplir con las medidas de distanciamiento derivadas del coronavirus y a cambio se puedan instalar un día más, los martes. «No vemos viable que el 50% de los comerciantes se instalen en un sitio y otro 50% en el otro. Supone repartir la clientela y no lo vemos bien», explicó Rubén Gabarri, presidente de la Cooperativa de Vendedores Ambulantes.

Los comerciantes prefieren esperar al mes de julio, una vez que la situación se normalice. «Nosotros queremos trabajar con todas las garantías en nuestros sitios habituales y seguir transmitiendo la confianza a los clientes», añadió.

Reconocen que tienen ganas de volver a trabajar pero siempre que sea todos juntos, al tiempo que consideran que el Ayuntamiento «está poniendo todo de su parte» para garantizar su vuelta.

Aunque una minoría quiere empezar a trabajar ya debido a la merma de ingresos durante la pandemia, el grueso apuesta por esperar a julio. «Preferimos esperar. En otros mercados se han dividido los puestos y no han funcionado», subrayó Enrique Jiménez, presidente de la Asociación de Vendedores Ambulantes. 

Polígono docente. Los propios comerciantes han propuesto al Ayuntamiento la posibilidad de instalar sus puestos en el polígono docente, en las calles donde habitualmente se ubicaban las barracas, durante el tiempo que dure esta situación al entender que los 130 comerciantes tendrían espacio suficiente para instalarse todos.

La concejala de Comercio, Dolores Ovejero, encargará informes a la Policía Local, los Bomberos y Protección Civil para ver si es viable. La ubicación planteada supondría tener que cortar el tráfico rodado tres o cuatro días a las semana y estaría supeditado a un informe del área de Tráfico. Paralelamente, si la actual situación se prolongara también se interferiría en los centros educativos cuando las clases se reinicien en septiembre. La última palabra la tendrá los responsables municipales.
La concejala de Comercio, Dolores Ovejero, recordó que solo se puede instalar un tercio de los puestos y con aforo reducido, según la normativa. La norma exige dos metros de distancia entre puestos y entre el vendedor y el cliente y carriles de paso de ida y vuelta para los compradores. En los casos del paseo del Empecinado y parque de los Poetas no es posible aumentar la superficie para guardar las distancias y tampoco en la avenida de Castilla y León, dado que no se dejaría paso a los peatones. 

Ovejero pedirá los citados informes para ver la viabilidad del polígono docente, en el espacio en el que se ubican las barracas, aunque en esta zona hay 10.000 metros frente a los 21.000 que sumarían entre el parque de los Poetas y el disuasorio. «Parece que hay mucho espacio pero es complicado».

Por su parte, el portavoz del PP, Javier Lacalle, mantuvo también una reunión con el colectivo y apuntó la posibilidad de que en el polígono docente únicamente se cortara uno de los carriles, de modo que pudiera pasar el tráfico por el que quede libre. «Hay que buscar una solución provisional y la propuesta que hace el colectivo nos parece viable. Sería una distribución similar a las barracas y se instalarían en un lado», aseguró.

El presidente de la Asociación de Vendedores Ambulantes, Enrique Jiménez, insiste en que deben estar todos juntos y muestra su preocupación por la incertidumbre sobre cuándo podrán regresar a sus espacios habituales. «Esto no es para un mes. Nosotros solo queremos trabajar pero juntos».