La rehabilitación de San Andrés propiciará su uso religioso y social

I.P. / Burgos
-

El Ayuntamiento y la parroquia firman un convenio para salvar el templo de la ruina y devolverlo al culto tras 10 años cerrado. El coste del proyecto alcanza los 140.000 euros

 
Tras varios meses de reuniones, el Ayuntamiento y la parroquia de Fresno de Río Tirón han rubricado un convenio de colaboración que salvará de la ruina a la iglesia de SanAndrés, cerrada desde hace diez años debido a los graves problemas de grietas en su estructura, como consecuencia del deterioro de la cubierta. El acuerdo entre ambas instituciones será refrendado mañana en el pleno municipal, que también dará luz verde al proyecto de rehabilitación que no solo devolverá el culto a San Andrés sino que permitirá adecuar un espacio para uso social y cultural.
Según  el convenio, la parroquia de Fresno procederá a segregar parte del inmueble religioso que cede al Ayuntamiento para auditorio multiusos y otros espacios. En concreto,  se ceden 622,78 metros cuadrados, de los que 351, 28 se corresponden a la nave transversal, ábside y sacristías laterales de la iglesia parroquial, además de  otros 6,50 metros cuadrados de terreno procesional anexo al ábside y 265 metros cuadrados más de cementerio, terrenos que están anexos al camposanto municipal. Será el espacio que ocupan los 351 metros cuadrados el destinado por el ayuntamiento a edificio de usos múltiples, para acoger eventos festivos,  las ferias de artesanía, conciertos, teatro, comidas de hermandad, talleres, gimnasia, etc. Y es que como explica el alcalde, Sergio María García, Fresno no dispone de ningún espacio amplio para este tipo de actividades. La satisfacción por la firma del convenio, por tanto, es doble para el regidor, ya que se salva el inmueble de un deterioro progresivo y se recupera para el culto y se dota a la localidad de un centro para los vecinos. Éste queda integrado en la estructura de la iglesia parroquial, pero tendrá entrada individual. 
En cuanto al templo, quedará para su uso religioso, una superficie de 275,22 metros cuadrados, que corresponde a la nave longitudinal del templo, desde el acceso actual hasta la división con la finca segregada; también se mantiene de titularidad parroquial otros 285 metros cuadrados de terreno procesional anexo a ambos lados de dicha nave hasta el cerramiento de la nave transversal. 
El proyecto de rehabilitación actuará sobre una superficie de cubiertas de unos 627 metros cuadrados, con un presupuesto de unos 140.000 euros. El estado de deterioro de la misma ha propiciado filtraciones que han afectado al propio entablado del tejado así como a las bóvedas con importantes humedades y con zonas colapsadas en la cubierta del crucero. Además del cambio de cubierta, se procederá a sellar las grietas existentes, mediante el picado y extracción de las piezas afectadas y sustitución por piezas recuperadas, con inclusión de armadura de acero galvanizado. El alero será conservado en su integridad, procediendo a su limpieza, retirada de piezas en mal estado y otras distintas a las originales y sustituyendo éstas por piezas cerámicas originales recuperadas;  se consolidará los muros exteriores que presentan grietas. En cuanto a la financiación, el Ayuntamiento pone 70.000 euros, al igual que la parroquia, mientras que Diputación y Arzobispado  aportan 10.000 euros cada uno mediante el convenio de restauración de iglesias.