Ocho de cada diez locales de hostelería no tienen más de dos empleados

J.M. / Burgos
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En el 40% de los negocios de la provincia, el único asalariado del establecimiento es la persona que lo regenta. Pese a la mejoría de los últimos años, los sindicatos denuncian que algunos empresarios no realizan contratos

¿Son mayoría los locales de hostelería en los que solo trabaja el dueño del negocio? ¿Es habitual que en casi la totalidad de los bares y restaurante tengan como máximo a dos empleados? El Instituto Nacional de Estadística (INE) desvela que esa es la realidad en la provincia de Burgos. Mientras, los sindicatos la desmienten al asegurar que detrás de esas cifras, en la realidad de la calle, se esconde un fraude histórico en el sector que se va corrigiendo con el paso del tiempo pero que no se ha erradicado todavía.

El número de negocios de hostelería a 1 de enero de este 2014 ascendía a 2.380 frente a los 2.428 que había un año antes. Es decir, que en ese balance de locales que abren y cierran, muy frecuente en los últimos tiempos, se perdieron 48 establecimientos en cuestión de 12 meses. De todos los que están abiertos, 967 no tendrían a ningún asalariado a excepción de quien lo regenta, un 40,6% del total, y en otros 971 establecimientos solo habría más de dos empleados. Esto quiere decir que en ocho de cada diez de estos espacios no hay más de  2 trabajadores con un sueldo. Podría haberlos, eso sí, en momentos puntuales.

La responsable del área de hostelería de CCOO en Burgos, Carmen Nebreda, explica, por un lado, que de unos años a esta parte se ha notado que «cada vez hay menos trabajadores por cuenta ajena». Achaca a «la Reforma Laboral» la destrucción de empleo y opina, por la experiencia en el sindicato, que «sobre todo» ha afectado «a los profesionales de más edad». Unos puestos, detalla, que no se suplen o en el que las nuevas incorporaciones se inician con contratos «más precarios».

Para Nebreda, los datos estadísticos no se corresponden con la realidad porque si bien sí podrían ser acertados «en los años 80, cuando fundamentalmente se montaban pequeños negocios», ahora «ya no es lo habitual».

En UGT, Beatriz Arza, la secretaria general de SMC (el área que representa a los trabajadores de hostelería), asegura que, sin ser una mayoría, hay todavía negocios que «tienen a toda la plantilla sin contratar» (que se les paga en negro). Y recuerda, como triste ejemplo, el de un empresario que «los metió en una cámara frigorífica» para no ser descubierto en una visita de la Inspección de Trabajo. Como éste, comenta otros casos excepcionales, aunque tampoco únicos, en los que «algunos empleados tienen que aprenderse el DNI de un compañero» por si acude algún funcionario a comprobar si todo está en orden.

Pero si en algo son más tajantes en los sindicatos es con muchas personas que sí han mantenido su puesto de trabajo. En CCOO detallan a modo de ejemplo que «en muchos restaurantes y hoteles se han modificado las condiciones de trabajo». Incide en que ha habido muchas reducciones de jornada «con el objetivo de mantener los empleos» pero matiza que eso degenera, en algunas ocasiones, en la realización de horas que luego no son retribuidas. Algo que sucede con frecuencia ya que en este sector el cierre del negocio, añade, solo lo marca muchas veces el momento en que deja de haber clientela. Es aquí también donde  reprocha que lo que antes eran consideradas como «horas extraordinarias sean ahora complementarias». Es decir, que se paguen por ellas la misma cantidad que cualquier hora de trabajo normal.

En ambos sindicatos coinciden en desatacar que los casos en los que hay empleados sin contrato no son la norma, pero animaron a a los empleados a «dar un paso al frente para mantener los derechos. Hay que ser valientes para hacer frente a empresarios piratas» que no hacen ningún favor a quien cumple.

Aunque son menos, en la provincia de Burgos se contabilizan 324 negocios de hostelería que tienen en su plantilla a entre 3 y 5 trabajadores. Con seis o más empleados con un salario hay más de un centenar de establecimientos.