Burgos, capital y provincia, se embarca en una nueva aventura para que su atractivo turístico no pase desapercibido fuera de sus fronteras. Y en esta ocasión se ha propuesto conquistar los paladares nacionales optando al título de Capital Española de la Gastronomía. Su intención es conseguirlo el próximo año, tomando así el relevo a Logroño, que ostenta durante 2012 este reconocimiento.
Para lograrlo, ya ha comenzado a sentar las bases de este movimiento gastronómico, tal y como lo definió el concejal de Cultura, Fernando Gómez. Primero, la Asociación Plan Estratégico aprobó la candidatura en la última reunión de su junta directiva. Ayer, una veintena de profesionales del sector, entre hosteleros, cocineros, representantes de productos autóctonos y denominaciones de origen, mantuvo un primer encuentro para fijar los ejes que guiarán este nuevo proyecto.
Desde sus inicios, la iniciativa se ha planteado ambiciosa y con posibilidades de éxito, pero sin dejar de reconocer que sus competidoras no pondrán fácil el camino. No hay más que echar un vistazo a las ciudades con las que compitió Logroño para corroborar esta afirmación, según comentó Gómez al referirse a Sevilla, Gijón, Segovia, Granada o Santiago. «Nos presentamos para ganar y si no se consigue, el trabajo no será en balde», sentención el edil.
Detrás de este reconocimiento se encuentran las Federaciones Españolas de Hostelería y Restauración, y de Periodistas y Escritores de Turismo, que en breve darán a conocer el plazo de presentación de las candidaturas para 2013 con el objetivo de resolver el concurso en el último trimestre de este año. Y dado que el tiempo apremia, la reunión de ayer dará paso a nuevos encuentros, menos numerosos, para que a mediados de junio esté finalizado el dossier, según reveló Mario San Juan, gerente de la Asociación Plan Estratégico.
El proyecto burgalés se sustentará en las iniciativas que se han desarrollado o se están desarrollando relacionadas con la gastronomía y en un proyecto a futuro, que a su vez, estará basado en cuatro temáticas: cultura, naturaleza, placer y viaje. O lo que es lo mismo, la gastronomía entendida como un fenómeno cultural, ligado a los sentidos, con excelentes materias primas fruto de su diversidad climática y características físicas, que se encuentra al alcance de la mano de aquel que decida visitar la provincia. Y estas líneas de acción se articularán a través de actos concretos, como talleres, menús temáticos, congresos o ferias, y de la implicación de la ciudadanía.
Si finalmente Burgos se hace con el título, las ventajas que ven sus promotores son numerosas. Gómez subrayó la amplia difusión y repercusión mediática de cuantas iniciativas culturales y gastronómicas se celebren en la provincia, sin dejar de señalar un «mayor apoyo institucional» a este tipo de proyectos.