El Mirandés quiere hacer bueno ante el Nástic el empate logrado en Soria. Los catalanes anteceden a los rojillos en la clasificación, por lo que un triunfo permitiría recuperar nuevamente una plaza en el play off, aunque Carlos Terrazas prefiere olvidarse de la tabla «porque estar un puesto arriba o abajo ahora no es relevante», y centrarse en acumular puntos.

El Mirandés ha sumado hasta la fecha la mitad de las unidades en juego, un porcentaje que si se  mantiene todo el año garantiza estar en la zona de privilegio a final de temporada. «Las dos últimas temporadas el Zaragoza y el Córdoba se metieron con el 48% del total», recuerda el técnico, quien valora que el equipo ha alcanzado esta cifra pese a estar todavía lejos de su mejor nivel.

Terrazas no esconde que «nos queda mucho por mejorar porque no somos perfectos», pero es precisamente el margen de mejora que ve en el equipo el que le hace tener una visión optimista porque «incluso haciendo muchas cosas mal, hemos sumado la mitad de los puntos». Y es que para el míster, lo preocupante sería que el equipo ya hubiera tocado techo porque «si hubiésemos logrado los mismos puntos jugando al máximo de nuestras posibilidades, el futuro sería peor».

En el debe rojillo están el saber administrar las ventajas en el marcador y reducir el número de goles en contra, aunque Terrazas deja claro que la efectividad defensiva no puede llegar a costa de perder presencia en ataque. «En el fútbol todo guarda relación pero no podemos pretender encajar menos a cambio de hacer también menos goles, sería un error», subraya.

El primer objetivo es consolidar la racha en casa, donde el Mirandés todavía no ha perdido. «Es importante tener el convencimiento de que somos fuertes en casa y saber que cada quince días en Anduva somos capaces de sacar los partidos», asegura Terrazas.

Para el entrenador rojillo, la visita del Nástic es una buena prueba de fuego. A pesar de que los catalanes no están mostrando a domicilio el mismo rendimiento que en el Nou Estadi, son uno de los equipos más en forma del momento. «Es un equipo que tiene muchos jugadores con experiencia y que saben lo que hacen», analiza.

Los de Tarragona son un recién ascendido pero se están codeando en la zona alta, una situación que no sorprende a Terrazas. «Tanto el Nástic como el Real Oviedo no son recién ascendidos normales porque son clubes históricos, con muchos años de trayectoria  en Primera y Segunda, y que a pesar de que acaban de subir, tienen capacidad para hacer proyectos fuertes».