Los vecinos de Oña se han vuelto a subir al escenario para representar El Cronicón, obra teatral que cumple su vigesimosexta edición y que lleva escenificándose de manera ininterrumpida desde 1988. En ella, se cuentan temas tan importantes como los orígenes de Castilla o la fundación del Monasterio de San Salvador de Oña. La principal novedad de este año reside en el cambio de actor principal, que tras haber sido interpretado durante veinticinco ediciones por José Ignacio Molinuevo, pasa a ser encarnado por Víctor Ibáñez, un joven de la localidad que ya ha participado en la representación en años anteriores y en el que su predecesor tiene puestas grandes esperanzas.
Además, este cambio ha provocado la renovación de otros personajes para adaptar la obra al actual protagonista.
Otra de las novedades de esta edición es el retorno de la función a la iglesia de San Salvador, ya que el año pasado la obra se celebró al aire libre porque el templo estaba ocupado por la exposición Las Edades del Hombre. La tradicional escena de calle que abre este año el espectáculo y que se realizará en la escalinata de la iglesia relata la devolución del cadáver del Conde García Fernández, padre del Conde Sancho, que había perdido su vida en la batalla contra Almanzor. En esta escena participan alrededor de 50 personas de los cuales 40 son niños y puede ser contemplada por todos aquellos que se acerquen a los alrededores de la iglesia. El Cronicón se estará representando hasta el próximo día 18 en el interior de la iglesia abacial de San Salvador a las 22 horas. Los interesados en asistir, pueden adquirir las entradas de varias maneras: acudiendo al local de La Agraria, situado en la escalinata de la Iglesia de San Salvador, a través de la página web del evento o llamando al teléfono 947 300462. El precio de las entradas oscila entre los 11 y los 14 euros.
La representación ha sido declarada Fiesta de Interés Regional por la Junta de Castilla y León y la directora de la obra, Amaya Curieses, afirma que El Cronicón es una obra «totalmente diferente al resto de funciones medievales que se representan en España», ya que lo que se cuenta en ella «no es una leyenda, sino una historia». Además, resalta que es «un espectáculo único representado en un espacio absolutamente único». Además, Curieses que en esta edición cumple su cuarto año como directora, dice sentirse «encantada» con el proyecto y anima a todas las personas que se puedan acercar a la villa a ver la función.
Nievo papel
Por su parte, José Ignacio Molinuevo, cuenta que abandona el personaje principal porque «físicamente» le puede y afirma que aunque le «duele mucho» dejar el papel, ya ha cumplido su «etapa» y que ahora le toca a otro. Sin embargo, el veterano actor no abandona el escenario, ya que continúa interpretando a un monje, un personaje que a pesar de ser secundario, tiene su importancia, ya que tal y como afirma el actor «Si no están los actores secundarios, el personaje principal no pinta nada».
Para terminar, los organizadores, señalan que cada edición es un gran reto debido al esfuerzo físico y la extraordinaria dedicación que se necesitan para llevar a cabo la función. Además, también resaltan el compromiso personal de cada uno de los vecinos que participan en la obra y el buen ambiente que se respira en los ensayos. Todos son conscientes de que con su trabajo contribuyen a la promoción de Oña y por ello se esfuerzan de principio a fin. Además, son muchos los niños que se implican en el proyecto por lo que el futuro está garantizado.