La evolución propia del entorno natural, los accidentes meteorológicos y la acción de la mano del hombre se suman a la hora de interferir en el disfrute seguro del medio ambiente. Un claro ejemplo lo tenemos en el sendero de gran recorrido GR-14, la ruta de senderismo que corre paralela a todo el cauce del Duero y que a su paso por la capital ribereña requiere al menos dos veces al año un repaso para que se pueda seguir utilizando. Aunque la jurisdicción de la cuenta y sus riberas depende de la Confederación Hidrográfica del Duero, esta acción se realizada desde este organismo con una pauta temporal más larga de lo que se precisa, a la vista del estado en el que se puede encontrar este entorno en Aranda.
Después de unos meses, el sendero GR-14 en territorio arandino acumulaba suciedad, ramas y grandes árboles caídos, destrozos motivados por el paso del tiempo o por actos vandálicos y desperfectos causados por las lluvias, como desprendimientos y corrimientos de tierra. Los voluntarios de Protección Civil en la capital ribereña organizaron una batida para poner en orden el estado de este sendero, utilizando los medios materiales con los que cuentan.
Tuvieron que retirar un gran tronco que se había quedado atravesado en medio del camino, impidiendo el paso normal por esta senda, además de despejar el paso de grandes rocas desprendidas y señalizar las partes en las que las barandillas de seguridad para evitar caídas al río Duero aparecían rotas o estropeadas. De esta forma, los voluntarios de esta agrupación arandina aseguran que el sendero GR-14 «ya está limpio y se puede transitar por él sin ningún problema».
Tanto las riberas como los propios cauces, y sobre todo estos, son el entorno en el que desarrollan parte de sus actividades los miembros del Grupo Espeleoduero, que este año va a llevar a cabo una campaña de limpieza y concienciación para fomentar el respeto a este entorno acuático. La prueba más visible de esta programación son las camisetas que lucen los miembros de la sección de piragüismo de este club, facilitadas por la empresa Recuperalia y la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento arandino, en las que se puede leer el lema ‘Duero, respétalo, disfrútalo. Mójate por él’ y con las que buscan que «se inculque ese respeto en todas las personas que disfrutan de nuestras riberas», como apunta José Luis Esteban, secretario de esta sección del Grupo Espeleoduero.
A lo largo de este año, tienen previsto llevar a cabo diversas acciones «que básicamente consistirán en la limpieza de nuestros cauces en las actividades que programa este club deportivo», manteniendo así una apuesta innata de esta agrupación deportiva «por la conservación de nuestros ríos y la práctica deportiva segura del piragüismo y otras actividades deportivas en nuestro entorno paisajístico», comenta Esteban.
Desde este club quieren insistir en que uno de sus objetivos es «preservar nuestras riberas y que nuestros ríos no sean meros canales de ladrillo, sino lugares donde se pueda contemplar la naturaleza y disfrutar de ella a la vez que se practica el piragüismo, la pesca, el senderismo, ciclismo, carrera o simplemente descansar disfrutando de nuestra flora y fauna», apunta el secretario de esta agrupación deportiva, que siempre colabora con sus embarcaciones en las diferentes actividades para las que les requieren, como filmación de series o anuncios, limpieza de residuos y troncos, búsquedas de desaparecidos o actos festivos.