La oposición rechaza la «histórica» subida fiscal y exige reducir gastos

A.R. / Burgos
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El concejal de Hacienda la justifica en la necesidad de incrementar el grado de cobertura de los servicios, bajar la deuda, buscar la sostenibilidad presupuestaria y pagar a proveedores

El concejal de Hacienda, Salvador de Foronda, charla con Carmen Hernando (PSOE) y Raúl Salinero (IU). - Foto: DB/Luis López Araico

No hubo sorpresas. Toda la oposición votó ayer en contra de la propuesta de Ordenanzas Fiscales que el equipo de Gobierno del Partido Popular llevó al Pleno. El debate resultó especialmente farragoso al no aceptar el grupo municipal socialista ni el concejal de Izquierda Unida el agrupar en bloques las tasas, precios públicos e impuestos -tal y como se ha hecho tradicionalmente- y exigir  la votación individual de cada ordenanza.    

Los portavoces del PSOE, UPyD e IU criticaron las subidas fiscales previstas por el PP e incluso Luis Escribano (PSOE) las calificó de «históricas». Además, denunció que, por primera vez, se hayan  llevado para su aprobación a un Pleno de julio «con el fin de que el asunto pase desapercibido lo más posible. Esto no tiene precedentes». Por su parte, el portavoz de UPyD, Roberto Alonso, se preguntó si «van a recaudar más o van a conseguir que haya menos usuarios en los servicios públicos» a tenor de las subidas y pidió que, en el caso del ámbito social, los incrementos se hicieran en función de la renta de los ciudadanos.

A este respecto, Raúl Salinero, portavoz de IU, lamento que las subidas dupliquen a las ya previstas para 2012 y pidió al PP que recorte en gastos innecesarios. A esta última idea se sumaron también PSOE y UPyD, que echaron en cara al equipo de Gobierno «derroche» y «despilfarro».

Desde la bancada popular, el concejal de Hacienda, Salvador de Foronda, justificó las decisiones en varios motivos. El primero, que el grado de cobertura de los servicios municipales (diferencia entre su coste y lo que el Ayuntamiento ingresa por ellos) llegue al 25%. El segundo, en la«necesidad» de reducir la deuda, llegando a los 130 millones a 31 de diciembre de 2012. Por último, en ser «leales» en lo que respecta a «sostenibilidad presupuestaria» y poder pagar a los proveedores.

De Foronda también miró al pasado y recordó a los socialistas que entre 2000 y 2003, cuando gobernaron, las tasas subieron más de un 35%.

Sobre las tasas, Alonso (UPyD) lamentó que «los ciudadanos tengamos que aguantar esta quimio [recortes e incrementos] sin que se haya solucionado el verdadero cáncer:la estructura administrativa del Estado, comunidades autónomas y ayuntamientos».

Entre las decisiones adoptadas  contra las que arremetieron los grupos de la oposición estuvieron las que afectan a servicios sociales, autobuses, agua y basuras, entre otros. «Se puede hacer otra política económica sin mermar la calidad de los servicios sociales», insistió en sus intervenciones el socialista Luis Escribano.

Las críticas más duras se hicieron contra los impuestos, ya que el de Bienes Inmuebles (IBI) subirá un 5,3% y vehículos un 5%. En este sentido, la socialista Carmen Hernando preguntó al equipo de Gobierno si con estas subidas piensan «colaborar» en salir de la crisis, en que crezca la economía y se fomente el consumo.

Por último, de Foronda aludió a que hay 37 capitales de provincia en las que el IBI es más caro que en Burgos, lo que provocó el rechazo de la oposición. Además, fijó los aumentos de impuestos en un 2,06%, al tiempo que recordó que se congela el Impuesto de Actividades Económicas (IAE).