Sumarse a la fiesta

Raúl Canales / Miranda
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El Mirandés quiere completar la celebración de la permanencia y de San Juan con un triunfo ante el Alavés. Los dos equipos apuran sus últimas opciones de seguir en la lucha por el play off (Anduva, 16.00 horas)

Anduva respirará ambiente festivo para recibir al Alavés (16.00 horas). La celebración de la permanencia por cuarto año consecutivo en la categoría y  la coincidencia con  San Juan del Monte darán un colorido especial a un derbi vecinal al que ambos llegan con los deberes hechos pero con ganas de apurar sus últimas opciones de aspirar a algo más.

El objetivo del play off es matemáticamente posible para los dos, aunque en el caso del Mirandés  queda muy lejano, ya que podría despedirse del sueño incluso ganando. Por su parte el Alavés, tras el pinchazo entre semana ante el Girona, desperdició una gran oportunidad para recortar diferencias y solo el ‘favor’ que le hizo el Mirandés en La Romareda le mantiene con vida en la pelea, aunque todo lo que no sea lograr un triunfo en Anduva les descartaría definitivamente.

En base al estilo de los dos rivales y de lo que hay en juego, se espera un partido intenso y muy disputado entre dos equipos con perfiles similares. El Mirandés ya ha demostrado que saca más rédito a los encuentros incómodos que a los de ida y vuelta y tratará de imponer su juego ante un rival que también tiene en la sobriedad una de sus máximas virtudes.

Aunque la acumulación de partidos empieza a pasar factura, sobre todo porque el de esta tarde será el tercero en siete días, Carlos Terrazas apostará por mantener el bloque habitual en la liga.

El técnico cuenta solo con las bajas de Espín Puerta y Docal, por lo que no se esperan cambios en el once inicial que saltó el miércoles al terreno de juego de La Romareda. La única novedad podría estar en el lateral izquierdo, donde el regreso de Javi Cantero, tras cumplir sanción, reabre la disputa con Gorka Kijera por la demarcación.

Por su parte el Alavés llega con la defensa bajo mínimos. Las secuelas del duelo ante el Girona se dejarán notar en Miranda donde el técnico Alberto López no podrá contar con Medina y Laguardia, que vieron la quinta cartulina amarilla. Además, Raúl García sufrió una rotura en el aductor que le impedirá actuar en los tres partidos que restan y le mantendrá inactivo buena parte de sus vacaciones.

Así, el míster albiazul deberá reestructurar la zaga casi al completo, un contratiempo del que espera sacar partido el Mirandés, ya que el entrenador visitantes deberá retrasar la posición de Sangalli en la derecha y apostar por Castillo y Migue para completar la línea, dos jugadores que pese a haber rendido a buen nivel cuando les ha tocado entrar, no han contado con muchos minutos en el segundo tramo de la competición.

Sin embargo, la principal preocupación en el Alavés pasa por Manu Barreiro, uno de sus jugadores más desequilibrantes. El punta será duda hasta última hora, ya que no ha podido ejercitarse en los últimos días, aunque intentará forzar dada la trascendencia del choque. Si no llega a tiempo, su lugar será ocupado por Juli.

Pasado albiazul

Si los duelos contra el Alavés siempre son especiales, por la rivalidad derivada de la proximidad geográfica, para algunos jugadores la cita de hoy tendrá un valor añadido ya que han militado en ambos equipos. En el Mirandés varios integrantes de la plantilla tienen pasado albiazul. Caneda, Álex Ortiz,  Igor Martínez y Emilio han pasado en diferentes etapas por el club vitoriano antes de recalar en Anduva.  

También el canterano rojillo Asier Barahona, aunque en su caso fue una cesión y posteriormente retornó al Mirandés.

En la plantilla alavesista únicamente Goitia ha vestido la camiseta rojilla. El portero defendió la meta en la campaña del debut en Segunda, bajo las ordenes de Carlos Pouso, completando un gran año, lo que le permitió fichar por el conjunto de Mendizorroza.