El presidente del PP en Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, anunció hoy que su partido “va a dar la batalla” en las Cortes, los ayuntamientos y las diputaciones, en las próximas semanas, ante la política energética “radical” del Gobierno de Pedro Sánchez, con medidas que afectan a la toda la comunidad, por el cierre de las centrales térmicas, en las provincias de León y Palencia, y la prohibición de “los motores diesel”, en Valladolid, Palencia, Burgos y Ávila. Mañueco cifró en un 15 por ciento el incremento del precio de la luz si cierran las térmicas, afectando “a todos los consumidores”.
Fernández Mañueco remarcó que el Gobierno Socialista está tomando decisiones que “afectan gravemente” a Castilla y León, con el cierre de las centrales térmicas de Palencia y León, tras conocerse hoy la comunicación oficial de Endesa al Ministerio de Transición Ecológica de cerrar, el 30 de junio de 2020, la central térmica 'Compostilla', en Cubillos del Sil (León), para no tener que acometer las inversiones necesarias para su adaptación a la normativa europeo medioambiental.
El presidente del PP en Castilla y León sostuvo que el cierre de las centrales térmicas va a suponer un incremento del 15 por ciento en el precio de la luz, que va a afectar a todas las empresas, las personas, “a nuestros bolsillos” y ésto es “algo muy grave”. Fernández Mañueco reclamó el mantenimiento de las centrales térmicas y aseguró que él tienen que valorar “las reflexiones que hace el Gobierno de España”, a través de la ministra, el secretario de Estado o los partidos políticos.
El líder regional del PP recordó que el PSOE, C’s y Podemos se negaron a “aprobar la Proposición No de Ley que presentó el Partido Popular” y, por lo tanto, se oposieron a que "el cierre o no de una central térmica" dependiera de "una decisión empresarial” sino que “el interés nacional también se pusiera encima de la mesa”. Fernández Mañueco insistió en que el cierre de las térmicas de Castilla y León y de toda España son “miles de puestos de trabajo directos e indirectos que se van a perder”.
Alfonso Fernández Mañueco dejó claro que el Gobierno de España no está poniendo en marcha una transicción energética sino “una política radical energética”, con la que “estamos absolutamente en contra”. El presidente del PPCyL también puso el acento en otra vertiente que también “pone en riesgo un sector tan importante” para Castilla y León y su economía como es la automoción, con el anuncio de la prohibición de los motores diesel, cuando “somos la primera comunidad autónoma exportadora de vehículos”.
Fernández Mañueco lamentó que “esta política radical”, que va contra los vehículos con motores diesel, vaya a afectar a las provincias de Burgos, Palencia, Valladolid y Ávila, porque “estamos hablando de muchos miles de puestos de trabajo que están en estos momentos en riesgo” y que puede llevar “al colapso a la economía de estas provincias”.