El Juzgado de lo Mercantil ha emitodo un auto declarando en concurso de acreedores voluntario a Maderas Ureta S.A., una de las empresas históricas y referentes en el sector maderero provincial y nacional. La sociedad de la familia Andrés Golvano había entrado en fase preconcursal hace ya unos meses afectada por la grave crisis que ha sufrido este sector en los últimos años por el desplome de su principal cliente, la construcción, y por los problemas derivados de su reciente expansión en el Reino Unido y de la adquisición de los activos, personal, maquinaria y marcas de la empresa concursada Raimundo Díaz (Radisa).
Esta última compra tuvo lugar a finales del año 2013 y convertía a la firma originaria de Quintanar de la Sierra, con más de 130 años de en trayectoria y premiada con el FAE de Oro en 2008, en líder de la distribución de la madera en España para profesionales e industrias. En aquel entonces, Maderas Ureta agrupaba cinco centros logísticos de distribución en Madrid, Valencia, Burgos, Valladolid y Salamanca.
La distribución se complementaba con la actividad de las plantas productivas ubicadas en Burgos (en el polígono del Alto la Varga, en el término municipal de Villariezo), Polonia, Hungría y Ucrania (todos ellos aserraderos de roble europeo) y las instalaciones en el Reino Unido, adquiridas más recientemente. Algunas de estas filiales han sufrido cambios en su propiedad en los últimos años.
Internacional
Esta expansión internacional hizo de la empresa burgalesa un referente en el mercado europeo y nacional, muy centrado este en el sector de la construcción y cuya crisis ha tenido un fuerte impacto en todas las empresas madereras, también en la provincia de Burgos. En caso más importante fue el de Interbon, adquirida finalmente por la multinacional austriaca Kronospan.
El auto del Juzgado, según hace público el Boletín del Registro Mercantil esta semana, está fechado el pasado día 17 de abril y aún no tiene carácter firme. En el mismo, el juez acuerda la intervención o suspensión de las facultades de administración y disposición del concursado.
Desde CCOOse informó ayer de que la compañía arrastraba problemas de impagos con algunos de sus trabajadores en los últimos meses, que han sido atendidos por este sindicato, y se estimaba que los afectados por la situación concursal estarán en torno a la docena de empleados.