Obligan a rehabilitar un edificio protegido de 1925 en calle Vitoria

G.A.T. / Miranda
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Los dueños pierden el juicio con el Ayuntamiento, que declaró en ruina económica este inmueble, que desde hace años está deshabitado y con protecciones por caída de cascotes

El edificio está abandonado y un sistema de andamios evita que caigan cascotes a la acera. - Foto: G.A.T.

Atribuido en su diseño al arquitecto Fermín Álamo, la calle Vitoria (números 9 y 11, esquina con calle Sorribas) conserva un singular y bello edificio de viviendas que lamentablemente está en estado ruinoso y abandonado. Tanto que el Ayuntamiento va a obligar a los propietarios a que ejecuten unas obras de rehabilitación del mismo, e igualmente todos los trabajos que sean necesarios que el inmueble, por su deterioro, suponga riesgo alguno para los ciudadanos.

De hecho ya desde hace años los viandantes tienen que soportar la existencia de un sistema de andamios y tejavanas que el Ayuntamiento obligó a colocar ante la detección de caída de elementos de la fachada. Pero ahora, los propietarios han perdido el recurso contencioso administrativo que interpusieron contra la declaración municipal de ruina, por lo que la ejecución de la rehabilitación pasa a ser obligada, aunque no se comprometen plazos.

El caso además se complica al tratarse de un edificio que tiene uno de los tipos máximos de protección urbanística, la estructural, que impide la demolición del mismo, obligando al tiempo a mantener la composición, los acabados de las fachadas y sus elementos singulares, sin que se pueda, como ha ocurrido en otros casos, demoler para levantar luego copiando la estética existente.

Con 16 viviendas de grandes dimensiones, el inmueble está vacío al haberse ido cerrando o trasladando a otras ubicaciones los comercios existentes, a excepción de uno de los locales comerciales de la planta baja, que aún mantiene abierta una oficina de seguros. «Es una vergüenza que esto lleve así tanto tiempo, paso casi a diario por aquí y da una pena enorme que en la calle Vitoria, con lo que ha sido, se permitan ésta y otras casas ruinosas», decía una señora al ver ayer a DB haciendo fotos para ilustrar esta información.

Desde el Ayuntamiento aclaran que la rehabilitación «es cuestión de la propiedad», y expresan su «sorpresa» por cómo se ha producido la llegada del caso a los tribunales. «Inicialmente la declaración de ruina se solicitó por la propia propiedad… era una ruina económica, cuando el valor de las obras de arreglo es más del 50% del valor del inmueble; y desde el Ayuntamiento se aprobó porque efectivamente se consideró que se encuentra en ruina, pero luego lo recurrieron», explica la concejala de Urbanismo, Aitana Hernando.

En cualquier caso, y preguntada por si como ahora se está haciendo en la calle Los Hornos con cuatro edificios el Ayuntamiento podría hacer de forma subsidiara las obras, Hernando explica que no se puede demoler al ser estructural la protección, pero reconoce que si hay inacción de los propietarios y la aparición de riesgos obliga a una obra de emergencia, «el Ayuntamiento actuaría de forma subsidiaria y se lo cobraría a los propietarios, por supuesto», dijo.