La reforma del Mercado del G-9 afronta sus últimos trámites con el objetivo de que las obras estén adjudicadas antes del 31 de diciembre y puedan comenzar en enero o febrero. La previsión es que los trabajos se prolonguen durante 10 meses, tiempo en el que los 9 puestos que desarrollan actualmente su actividad en esta plaza de abastos no tendrán una ubicación provisional a la que trasladarse, tal y como ayer avanzó la concejala de Comercio, Carolina Blasco, tras la comisión informativa de este área.
Blasco justificó esta decisión en que no existen «razones económicas, técnicas y jurídicas» para plantear la alternativa de un emplazamiento temporal mientras se ejecuta la actuación, que contempla 16 puestos. Por un lado, aludió a que no se sabe cuántos de esos nueve comerciantes continuarán en la futura dotación, además de que sus concesiones están ya caducadas (el Ayuntamiento las prorroga anualmente) y, por tanto, no tienen los mismos derechos que si estuvieran vigentes hoy en día.
El portavoz del PSOE, Daniel de la Rosa, aseguró que si se hubiera dado este último caso su formación no dudaría en plantear alternativas, pero que dadas las circunstancias «no se puede hacer un mercado provisional para cinco». No obstante, avanzó que todos los grupos políticos han acordado mantener una reunión con los comerciantes afectados para explicar la situación.
Imagina no compartió la opinión del PPy del PSOE y propuso que los puestos pudieran trasladarse durante la obra a locales vacíos del Mercado Norte. El hecho de que no exista un ubicación provisional es, a su juicio, un agravio comparativo con los concesionarios de esta última plaza, que sí que la tendrán mientras se ejecute la nueva.
Al respecto, De la Rosa precisó que la situación no es la misma y que en este caso hay concesiones en vigor y más de la mitad de los actuales comerciantes tienen intención de trasladarse a la futura dotación. Sobre este proyecto, la Comisión de Comercio aprobó el pliego de prescripciones técnicas y las bases del concurso de ideas que se convocará para elegir la actuación ganadora. Será el segundo y para que no ocurra lo mismo que el primero, que quedó desierto, se ha ampliado la partida y el plazo.
Blasco precisó que la cuantía pasa de los 225.000 a los 400.000 euros, que incluyen 17.000 euros en premios para incentivar la participación. El plazo para presentar las propuestas va de los 30 a los 75 días. Además, habrá un jurado «más técnico», se primará el diseño del edificio y la intervención en el espacio urbano, y se ha atendido la petición de que los puestos se concentren en la planta principal.
hasta 12 millones. El procedimiento a seguir es largo y podría extenderse durante 15 meses hasta que se puedan licitar las obras. En cuanto al presupuesto final, la previsión habla de ocho millones, si bien De la Rosa precisó que no contempla el mercado provisional o la urbanización de la calle Hortelanos, por lo que estima que «no costará menos de 12 millones».