La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha explicado que está trabajando de forma conjunta con Campofrío, con la Junta de Castilla y León, así como con los ninisterios de Economía, Industria, Empleo y Agricultura para que la cárnica disponga de una o dos plantas en Burgos que le permitan mantener los empleos tras el incendio que destruyó la central hace unos meses.

"Campofrío es esencial para Burgos y trabajamos para que pueda volver a disponer de una o dos plantas, volver a reinvertir y mantener los puestos de trabajo, porque además la empresa quiere hacer ese esfuerzo", ha explicado la vicepresidenta del Gobierno en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.

La vicepresidenta ha incidido en que ha mantenido reuniones con la Junta de Castilla y León, responsables de Campofrío y con diferentes departamentos ministeriales "para trabajar en distintas líneas, siendo la más urgente, la de empleo que se ha aprobado hoy".

En concreto, el Gobierno ha aprobado un Real Decreto que regula el Programa de Activación para el Empleo, por el que las empresas que, como en el caso de la central incendiada de Campofrío en Burgos, se vean obligadas a suspender contratos o jornadas por razones de fuerza mayor y que tengan comprometidos planes de reinversión y de mantenimiento del empleo, se verán exoneradas en el 100% del pago de sus cuotas sociales.

Además, Sáenz de Santamaría ha reiterado el compromiso del mantenimiento del empleo de la cárnica española y su compromiso por la reinversión, y ha subrayado que Campofrío "quiere hacer un acuerdo de rentas para mantener el poder adquisitivo de sus trabajadores".

El Gobierno también ha admitido que está trabajando en otros ámbitos para que la empresa pueda disponer de "distintos préstamos a intereses razonables de programas de reindustrialización", así como "inversiones relacionadas" con la UE e incluso líneas ICO de las que se podría  beneficiar.