Ante la baja aceptación en la venta de los vuelos a Barcelona para la única semana en que debía competir con Air Nostrum, León Air decidió aplazar sus conexiones a la Ciudad Condal y posponer su inicio de actividad en Villafría, inicialmente previsto para ayer lunes, al próximo 5 de mayo. El responsable de la empresa, Santos Álvarez, manifestó que se había adoptado la decisión de recolocar en las conexiones de la filial de Iberia a la inmensa mayoría de los pasajeros que habían comprado un billete con ellos. Otros, tal y como añadió, «han querido que se les devolviera el importe».
Ante la polémica suscitada en el concurso del consorcio del aeropuerto de León, desde donde se manifestó que León Air había presentado una oferta en la que no quedaba acreditada ni la solvencia técnica ni la económica, la empresa se defendió al asegurar que cumple todos los requisitos necesarios para operar. También desde Villafría.
Desde la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) informaron a este periódico de que «León Air no es una compañía aérea, sino una empresa aeronáutica que comercializa billetes de la polaca Sky Taxy (que es quien pone el avión y la tripulación)» y aclararon, por tanto, que «no tiene obligación de tener un Certificado de Operador Aéreo (AOC)». Un requisito que se había insinuado como una de las causas para que se les eliminara del concurso en la capital vecina.
Álvarez afirmó, sin aportar cifras, que las ventas de billetes a partir de la próxima semana, ya sin competidores, está siendo mejor que con la filial de Iberia operando desde Burgos.
El día 5 de mayo se producirá la primera de las seis conexiones semanales que mantendrá con la Ciudad Condal hasta mediados del mes de septiembre.
A partir de mediados de junio, además, comenzarán a despegar desde Villafría los vuelos estivales. Dos semanales a Palma de Mallorca y a Menorca y uno más a Alicante y a Málaga.
Para todas estas operaciones, el Consorcio para la Promoción del Aeropuerto de Villafría aportará 300.000 euros y se garantiza que no pagará a León Air hasta después de que se hayan producido los vuelos. En la provincia vecina, Air Nostrum es la única empresa que sigue viva en el concurso que se convocó para una operativa muy similar y a la que destinará alrededor de 700.000 euros. La filial de Iberia, que decidió marcharse de Burgos, mantiene sus rutas a Barcelona desde León, Salamanca y Valladolid.