El próximo día 26 en la asociación de vecinos Todos Unidos (Barriada Inmaculada Bloque H nº 2 frente al colegio Alejandro Rodríguez Valcárcel) va a celebrarse una asamblea abierta con  el objetivo  último de poner la primera piedra para la constitución en Burgos de una asociación de familiares y amigos de presos. Esta convocatoria es parte de unas jornadas que han organizado Saltando Charcos y el Centro de Voluntariado Social para analizar la situación en la que se encuentran las personas encarceladas.

Consideran los colectivos organizadores que es necesario organizar a las familias de quienes están presos para orientarles en la burocracia y el vocabulario de una administración que no se caracteriza precisamente ni por su transparencia ni por su agilidad. Rosa Marqués, portavoz de la Asociación de Familiares y Amigos de Presos en Madrid (Afaprema), explicó que la frustración y el miedo son monedas comunes en el entorno de quien entra en prisión.

«Sienten mucha angustia porque no tienen toda la información, no saben donde acudir y es un mundo del que se desconoce todo. Además, hay que tener en cuenta de que no todas las familias tienen la misma formación.  En cualquier caso, tenemos que ser conscientes de que a cualquiera nos puede pasar entrar en una cárcel», manifestó Marqués, que participará en una mesa redonda dentro de las jornadas que analizará experiencias de trabajo con las personas presas.

LEGITIMACIÓN

Considera esta experta que al asociarse los familiares y los amigos de quienes están internos en un centro penitenciario reciben «una legitimación y un apoyo del que carecen si van solos». En este sentido, aseguró que realizar cualquier modificación en el hermético sistema penitenciario español es un esfuerzo titánico, que se puede intentar con el respaldo de un colectivo organizado.

Afaprema lleva trabajando desde el año 2010 y se constituyó para sistematizar un trabajo que ya se estaba haciendo pero de forma más ‘desorganizada’ puesto que existían (y existen) páginas en internet y blogs donde los afectados  toman contacto.

Los problemas que, en la actualidad, más preocupan a los familiares de los presos son, a juicio de Rosa Marqués, la falta de asistencia médica especializada en algunas prisiones, de control en los programas de metadona como sustitutivo de la heroína y los fallecimientos que se producen: «Se está llegando a una muerte a la semana y esto es lo peor que le puede ocurrir a una familia, el episodio más duro que puede vivir, el no ver salir a su familiar con vida de la cárcel».

El 80% de los internos de las cárceles españolas lo son por robos y por delitos contra la salud pública (tráfico de drogas).