El sector empresarial coincide en que el desarrollo de la plataforma intermodal de Ircio favorecerá que nuevas firmas se instalen en el polígono industrial. José Luis Solana, presidente de la Entidad de Conservación del Polígono de Bayas, se refirió ayer a la futura terminal como la «locomotora de Miranda», y no le falta razón. Se trata de un proyecto que se lleva gestando años, que es el paso definitivo (al margen de la conclusión del vial de acceso por carretera) para que las empresas que allí se instalen tengan conexión directa con el ferrocarril y transporten de forma rápida sus mercancías.

El Centro Logístico de Miranda, denominado Ebrolog, continúa avanzando. Desde hace un año y medio se dispone de la autorización del ADIF (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) para la conexión con la red ferroviaria de interés general en Ircio, y ahora, la sociedad que lo impulsa, Miranda Logística, ya está en disposición de contratar el proyecto de ejecución y adjudicar la obra, cuya inversión ascenderá a «entre 6 y 7 millones de euros».

Para financiar la importante actuación se quieren solicitar ayudas europeas. El plazo para concurrir finaliza en febrero, por lo que su gerente, Moisés Revuelta, consideró que hay que «moverse rápido y con firmeza». Existen varias líneas de financiación, una para proyectos de ejecución y otra para obra. Tienen que decidir si presentarse a las dos convocatorias o una concreta. «No lo tenemos decidido», señala Revuelta, quien añade que quieren aprovechar el hecho de que «ahora que estamos dados de alta en el corredor Atlántico, recientemente aprobado por la Unión Europea» y que el Ayuntamiento de Miranda se ha unido a un protocolo, junto con el resto de municipios de la Comunidad, «para tener una voz única dentro de la macrorregión». En su opinión, estos dos factores pueden favorecer que Europa respalde la financiación de una obra que va a dar un valor añadido al polígono de Ircio. «Estamos todos de acuerdo, aparte de las dificultades que tiene ahora de venta por la coyuntura económica, que sin conexión ferroviaria tiene más dificultades, y eso es lo que hay que aprovechar ahora y hacerlo con celeridad», expuso Revuelta.

La conexión ferroviaria será de doble conexión, lo que significa que habrá conexión de entrada y salida, en la margen izquierda de la línea ferroviaria Castejón-Bilbao, lo que aportará «mayor agilidad en el movimiento de trenes». A medio plazo, la obra se completará con un edificio de control, un taller de mantenimiento y la consecución de todas las playas de vías (para la carga y descarga) que se necesitan.

Miranda Logística está ya trabajando en proyectos intermodales que aporten tráficos al polígono. «Ya disponemos de nombres y apellidos tras una intensa labor de comercialización con puertos y terminales marítimas», confirmó.  Una labor que seguirá incrementándose en los próximos meses a medida que la terminal se haga realidad.